El regadío del Val de Lemos solo se abrirá dos veces este verano y para fincas de maíz
SOMOS AGRO
La asociación que reúne a los usuarios acordó limitar el uso de las acequias a cultivos profesionales
24 jun 2022 . Actualizado a las 18:59 h.Por vez primera vez desde su construcción, hace más de medio siglo, el canal del Val de Lemos no suministrará agua de forma generalizada en una campaña de riego. El embalse de Vilasouto, del que se abastecen las acequias, solo abrirá sus compuertas ocasionalmente a lo largo del verano y para cubrir las necesidades hídricas de plantaciones de maíz. «Hai pouca auga e non se pode malgastar fóra dos cultivos profesionais», señala Alicia Toirán, ganadera del municipio de Bóveda y presidenta de la asociación que tutela el regadío.
La apertura del regadío suele producirse a finales del mes de junio, aunque las fechas varían en función de la pluviometría del año. A partir de ese momento, el agua discurre por el canal hasta que se da por cerrada la campaña. Este verano, sin embargo, esa imagen solo se podrá ver en dos ocasiones que coincidirán con momentos puntuales en los que más necesiten la riega los cultivos de maíz. Las últimas lluvias postergaron por ahora la apertura de las compuertas del embalse.
«A primeira rega —explica Alicia Toirán—está sen data, todo dependerá das necesidades do millo. De momento, e co que choveu eses días atrás, decidimos retrasala. Confiamos que haxa capacidade para facer dúas, unha a finais deste mes. A outra posiblemente non sería necesaria ata a finais de xullo ou primeiros de agosto». Todo dependerá, en última instancia, «de como veña o tempo».
La decisión de limitar a dos las riegas fue adoptada por la asociación de usuarios en vista de la situación de sequía. «Nunca pasara algo así, pero non se acumulou auga cando foi o tempo e faltou neve nas montañas para que o río recollese o desxeo», dice la presidenta. El agua disponible se destinará al maíz, según indica, porque es el cultivo más extendido en este regadío entre los agricultores profesionales.
No es para huertas
La asociación de regantes hace hincapié en que el canal fue construido para atender las necesidades de los agricultores que viven del campo y no para regar huertas de particulares. Este criterio se va aplicar ahora a rajatabla debido a la escasez de agua motivada por la prolongada sequía. Una apertura generalizada de las acequias propiciaría, por otro lado, usos «irregulares» del agua que en muchos casos serían difíciles de detectar. «Onde non conste que hai cultivo de millo non se lle vai dar auga», avisa Alicia Toirán.
Tampoco llegará el agua a la totalidad del canal en las dos ocasiones en las que se abrirá este verano. El abastecimiento se limitará a los tramos en los que las acequias discurren por zonas de cultivos agrícolas, que son una pequeña parte de la superficie total que cubre esta infraestructura. El regadío está dividido en tres canales: el alto, el de la margen derecha y el de la margen izquierda. En el caso de la margen derecha, la parte en la que discurre por el municipio de Monforte, no habrá campaña de riego este verano. En este tramo la agricultura es residual y es frecuente el empleo del canal para usos ajenos a su cometido.
El embalse de Vilasouto no tiene aprovechamiento hidroeléctrico. Fue construido para abastecer teóricamente a 4.710 hectáreas de terreno de los municipios de Bóveda, Monforte, A Pobra do Brollón, Pantón y Sober. También se destinó al suministro de agua a O Incio y Bóveda, aunque este municipio dispone ahora de otra captación. La campaña de riego se limita este año para evitar que los malos usos del agua lleguen a afectar al abastecimiento.