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El Nespresso de los despertadores

Javier Armesto Andrés
Javier Armesto CRÓNICAS DEL GRAFENO

OCIO@

28 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Guillaume Rolland, un joven de 18 años que estudia ingeniería en la Universidad Tecnológica de Compiègne (Francia), va a revolucionar la forma de despertarnos. Nada de molestas alarmas, ni ruidos escatológicos procedentes del baño del vecino. Guillaume ha diseñado un despertador que en vez de sonido emite aromas contenidos en cápsulas intercambiables, algo así como una Nespresso de los olores. ¿A quién no le apetece levantarse por la mañana cuando la casa huele deliciosamente a café y tostadas? SensorWake ofrece seis perfumes diferentes, desde el de desayuno continental (espresso y cruasán caliente) al de aromaterapia tonificante (té verde y chocolate), e incluso uno denominado «sala VIP» que huele a dólares y ébano. Basta con introducir la cápsula deseada -da para 60 usos- y a la hora prefijada empezará a soltar su carga; el 99 % de la gente se despierta en menos de dos minutos. «Pensé que, en el siglo XXI, todo el mundo debería tener derecho a levantarse feliz, relajado y tranquilo, listo para un gran día», explica Guillaume. El proyecto está, cómo no, en Kickstarter.