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Waverly Labs se queda «lost in translation»

Javier Armesto Andrés
Javier Armesto BARCELONA / ENVIADO ESPECIAL

OCIO@

La compañía que está desarrollando unos auriculares que traducen cualquier idioma tiene problemas para hacer demostraciones reales de su producto

02 mar 2017 . Actualizado a las 08:10 h.

Four Years From Now (4YFN, cuatro años a partir de ahora) es una feria asociada al Mobile World Congress que se celebra fuera del recinto principal, en Montjuic, que es donde tenía lugar hasta hace cuatro años la feria antes de mudarse a su actual ubicación por falta de sitio. En este espacio están algunas de las start up más frescas e innovadoras, que desarrollan proyectos que pueden cambiar el futuro. Entre ellas se encuentran Waverly Labs, una compañía de Nueva York que ha llamado la atención de todo el mundo con la promesa de un producto revolucionario. Se llama Pilot y son unos auriculares que supuestamente traducen al instante lo que dice nuestro interlocutor en otro idioma. La idea se está financiando a través de la plataforma de micromecenazgo Indiegogo y hasta el momento ha recaudado más de 4 millones de dólares. Sin embargo, todo lo que en Waverly Labs tienen hasta ahora son unos prototipos que han llevado al Mobile y que nos dicen que no está permitido fotografiar de cerca. 

Pilot funciona en combinación con una aplicación de traducción de voz y texto ya disponible en Google Play y la App Store y que básicamente hace lo mismo que el traductor de Google. En las demostraciones que ofrecen en la feria, un miembro del equipo de Waverly habla directamente a la app que tiene en el smartphone, que envía la traducción al prototipo, lo que no es diferente a la transmisión por bluetooth de cualquier otro contenido desde el móvil, como música, notificaciones de audio o una llamada. 

Por supuesto, en su web la compañía norteamericana muestra unos auriculares de diseño, que serían los que finalmente enviarían a las 22.000 personas que ya reservaron un kit en la primera campaña para recaudar fondos. Cada una de ellas ha pagado 199 dólares, mientras que el producto final costará 299 (quienes se apunten en este momento tendrán un descuento del 15 %).

Waverly explica que el proceso de traducción utiliza dos micrófonos y algoritmos de cancelación de ruido. Uno de los auriculares Pilot filtra el sonido ambiente de la voz de alguien hablando; la app traduce sus palabras «utilizando reconocimiento de voz, máquinas traductoras y aprendizaje automático, así como tecnologías de síntesis de voz», y finalmente el segundo auricular entrega la traducción. Todo esto ocurriría simultáneamente, sin interrupción, mientras hablamos con otra persona, pero de momento no ha sido posible probarlo. 

Adquirir idiomas adicionales

Los lenguajes soportados son español, inglés, francés, italiano y portugués, aunque, en un intento de monetizar todavía más el producto, los usuarios podrían adquirir idiomas adicionales, incluyendo árabe, chino mandarín, alemán, griego, hindú, japonés, coreano, polaco, ruso y turco. Con los Pilot, el problema de no saber idiomas estaría solucionado y el mundo dejaría de ser una torre de Babel. Pero, de momento, la empresa que los desarrolla está un poco perdida en la traducción.

El caso ejemplifica uno de los problemas de las plataformas de micromecenazgo: la facilidad para conseguir financiación es inversamente proporcional a las posibilidades de que un proyecto se haga finalmente realidad. Bastan unas fotos bonitas o unos renders (imágenes creadas por ordenador), acompañados de una buena dosis de márketing, para convertir un proyecto en viral. El CEO de Waverly Labs, Andrew Ochoa, era entrevistado el martes por la tarde por la CNN en el pabellón de Four Years From Now con los oropeles propios de una estrella del congreso de telecomunicaciones más importante del mundo. Dentro de unos meses, a finales del verano, tiene que entregar las primeras unidades de sus auriculares y entonces se verá si de ellos sale una experiencia cercana a lo que vende su compañía o solo humo.