Fallece a los 90 años Xavier Montsalvatge, el más importante compositor catalán actual
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El compositor gerundense Xavier Montsalvatge falleció en la mañana de ayer en Barcelona. Aunque se desconoce la causa de la muerte, Montsalvatge, de 90 años, padecía desde hace tiempo una grave enfermedad respiratoria. Su hija, Ivette Montsalvatge, explicó que el compositor había fallecido en la misma cama que lo hicieron su padre y su abuelo. Montsalvatge nació en Girona el 11 de marzo de 1912 y durante su larga carrera musical compuso más de un centenar de obras que tocaban todos los géneros musicales como el sinfónico, la ópera, el ballet y hasta música para cine. El compositor se relacionó con la música desde muy joven. A la muerte de su padre, con 9 años, dejó su Girona natal para trasladarse a Barcelona donde viviría con su abuelo materno y sus tías. La influencia de su familia fue fundamental para que el pequeño Xavier iniciará sus estudios de música en la ciudad condal bajo la tutela de Enric Morera y Jaume Pahissa. Durante su estancia en Barcelona conoció la obra de Stravinsky, Falla y Schonberg entre otros, de la mano de los propios compositores y de intérpretes de la talla de Rubinstein, Ladowska, Casals o los ballets rusos de Diaghilev. Tras recibir un premio por su primera obra Impromptus para piano, Montsalvatge utilizó esos ingresos para desplazarse a París donde finalizaría sus estudios. Grandes intérpretes Los críticos habían destacado que su «música sólo se parece a la de Xavier Montsalvatge». Este carácter de propiedad única y personal era su gran cualidad. Además, su música creció mucho más debido a las personas que interpretaron su obra como Narciso Yepes, Montserrat Caballé o Victoria de los Ángeles. Sin embargo, y pese a su larga carrera musical, Montsalvatge tenía miedo de que su música llegara a desprestigiarse. Su último gran éxito fue la ópera Babel 46 que llevaba muchos años enterrada en sus cajones y que hace unos meses veía por fin estrenada en el Teatro Real de Madrid. Entre otras composiciones, destacan Cinco canciones negras (1946), Cuarteto indiano (1952) y Concierto breve (1953). También pasarán a la historia de la música española piezas como Sinfonía mediterránea (1949); las óperas Desintegración morfológica de la Chacona de Bach (1959) y Una voz en off (1962); así como Homenaje a Manolo Hugué (1971); Concert-capriccio para arpa y orquesta (1975); Sinfonía de réquiem (1986) y Sortilegios (1992).