«Este es el comienzo del cambio», explica Susana Vila, presidenta de la Asociación Gallega de Instaladores de Telecomunicaciones, para aclarar que mañana no habrá ningún apagón y ningún espectador se va a quedar sin ver la televisión, ya que todavía queda margen hasta el 31 de diciembre. Sí señala que «es importante que se adapten las antenas colectivas cuanto antes» y asegura que de momento este proceso «aún está empezando». «Debería haber empezado antes, pero la reorganización del espectro radioeléctrico en España ha sido complicada -señala-. Ahora todo ese trabajo está hecho y falta la parte más mecánica, pero haremos todo lo posible por tenerlo todo a tiempo».
Reconoce Susana Vila que, en algunos casos, los instaladores se encuentran con problemas de stock para abastecerse de las piezas necesarias para adaptar los equipos de los edificios. «Por eso es importante que las comunidades de vecinos soliciten los trabajos cuanto antes, porque es difícil para los instaladores hacer acopio de material si no sabemos antes cuántos equipos vamos a tener adaptar», subraya.
Álvaro Orosa, responsable de la empresa instaladora coruñesa Segatel, confirma que los trabajos de adaptación de antenas a las nuevas frecuencias todavía están empezando. «De momento estamos revisando equipos y dando presupuestos, pero aún no hemos empezado a cambiar cabeceras -explica-. El material está pedido desde septiembre y en octubre hemos empezado a recibirlo, pero faltan algunos módulos; los fabricantes nos están sirviendo con dificultades».
Asegura que, en general, la televisión se va a seguir viendo normalmente con excepciones como la de Teledeporte, «porque se muda al canal 42, que no está instalado todavía». También pueden darse otros fallos en equipos muy antiguos, por lo que la principal recomendación es contactar cuanto antes con un antenista.