El programa celebrará este sábado la efeméride emitiendo a partir de las 23.30 horas tres de sus mejores reportajes
10 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Las noches televisivas de los sábados han visto pasar en los últimos años todas las modas. La moda de Noche de fiesta, que impuso el estilo de espectáculo de José Luis Moreno; la época de los debates de Moros y cristianos; la crónica social de Salsa rosa; el hito de La noria o la actual entrega total al debate político de La sexta noche. Durante todo ese tiempo, La 2 se ha mantenido fielmente consagrada a La noche temática, programa que cumple veinte años consagrado a reflexionar sobre acontecimientos históricos, temas sociales y personajes relevantes.
El programa arrancó el 3 de octubre de 1995 con una emisión cuya temática general se centraba en La era de los simulacros. Bajo ese contenedor, se emitieron entonces tres cortometrajes: Vender la guerra, La desaparición y El efecto Koulechov, además de la película La seducción del caos, de Basilio Martín. Desde entonces se han emitido más de 1.700 documentales y 400 películas reunidos bajo una temática común.
En sus comienzos, y durante su primera década, el programa se realizaba en colaboración con la cadena francoalemana Arte, si bien posteriormente amplió sus contenidos a producciones españolas.
Para celebrar sus dos décadas en La 2, esta noche ofrecerá, a partir de las 23.30 horas, tres de los mejores documentales emitidos en estos años, los titulados No puede haber un Kennedy feliz, Dictadores: sexo y poder y Hayley: la adolescente más vieja del mundo.
En el primero de ellos, una producción francesa del 2010, disecciona a la familia más renombrada de Estados Unidos a través de la historia de los niños Caroline, Robert, Christopher, Mary, John y David, que tenían entre siete y once años cuando JFK fue asesinado y que siempre crecieron al margen de la realidad, desde que el irlandés abuelo Joe forjó su leyenda.
Dictadores: sexo y poder es una producción francesa que observa a algunos de los gobernantes más absolutistas y despiadados de la historia desde la óptica de su característica sexualidad.
Por último, el documental británico Hayley: la adolescente más vieja del mundo acompaña a Hayley, una niña de trece años que padece una enfermedad rara llamada progeria que hace que su cuerpo envejezca a una velocidad superior a la normal.