Cuando la mesa no es (o no parece) una mesa

La Voz REDACCIÓN

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Mesas con originales y ambiguos diseños de El Corte Inglés
Mesas con originales y ambiguos diseños de El Corte Inglés

La decoración se ha convertido en una materia tan ecléctica que los objetos han perdido su funcionalidad, pero no su sentido. Baúles que son sillones, escaleras que son estanterías o cubos de bronce y estructuras circulares que son mesas

30 oct 2014 . Actualizado a las 09:39 h.

No solo ya no es necesario que los sillones de un salón sean todos iguales, ni que la mesa de comedor case con sus correspondientes sillas, ni siquiera que la decoración de un hogar atienda a una estudiada gama cromática o a alguna temática común. La disciplina decorativa se encuentra en tal fase de desorden estético y amalgama intencionada que, además, los objetos se han desprendido de la función para la que han sido ideados. Pierden su cometido, pero no su razón de ser. Y, tomando nuevas posiciones, se reinventan para enriquecerse, recolocarse y volver, de nuevo, a ser útiles.

Es el último grito en tendencias de hogar. Cajas que son estanterías, arcones que ahora son sofás, escaleras que son percheros, raquetas que se han convertido en espejos y taburetes, que son mesas. A medio camino, pendula entre el diseño convencional y esta estética minuciosamente descuidada, que evoca garajes, trasteros y espacios industriales, el diseño ambiguo. Mesillas auxiliares que parecen bloques de metal, esqueletos de hierro que se convierten en útiles consolas o veladores dorados. El Corte Inglés cuenta con algunos ejemplares, dorados, plateados y en bronce, como esta Tánger Oro o esta Fez Cobre, que cumplen este cometido a la perfección. También destacan los inusuales diseños de esta Dubai Cobre, de la auxiliar lloyd Oro o la Hole Marfil en fibra de vidrio.

Si de mesas va el asunto, predominan en estos tiempos todo tipo de elementos reciclados que se disfrazan de este mueble, que puede ser tan útil, para comer o estudiar, como decorativo. Torres de maletas antiguas, unas sobre otras; banquetas que hacen de mesillas de noche; papeleras del revés; carretes de bobinas; troncos o barriles.

Decoracionuno

Del mismo modo, otros integrantes del mobiliario más convencional rompen filas y ocupan puestos distintos por toda la casa. Los cuadros se apean al suelo, para colocarse de pie, apoyados junto a la pared; las escaleras trepan para convertirse en estanterías o percheros; las antiguas lecheras, en paragüeros; las botellas emigran de la mesa y se ponen ahora en la piel de las lámparas; y objetos prácticos, como las raquetas de tenis o de bádminton, adquieren un rol más presumido, y resucitan convertidas, por ejemplo, en espejos. Que empiece el juego de cambiarse los papeles.

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