Un 7 con alma de delantero centro

Pedro José Barreiros Pereira
pedro barreiros A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

Lucas marca diferencias como referencia en ataque y desde un sistema 4-5-1

10 oct 2015 . Actualizado a las 17:15 h.

Lucas, el dorsal 7 del Dépor, se está revelando como el mejor 9, el atacante más destacado de su equipo. El inicio liguero ha esbozado un futbolista hambriento de goles y capaz de mirar a los ojos a los grandes artilleros del campeonato. La confianza de Víctor Sánchez en el coruñés le ha llevado a alinearlo en todos los partidos disputados desde el pasado 22 de agosto (incluido el amistoso contra el Lugo), de inicio o en el tramo final, como delantero centro o en la mediapunta, desde el clásico esquema 4-4-2 o en la alternativa del 4-5-1. Este es un análisis de la pólvora del jugador más desequilibrante de este Deportivo aupado a puestos europeos.

Más disparos

Nunca remató tanto como contra el Rayo. Para muchos fue su mejor partido con la camiseta blanquiazul. De vuelta al estadio que lo vio debutar en el fútbol profesional, el siete coruñés protagonizó un bombardeo sobre la portería de Juan Carlos. Lucas marcó únicamente el tercer tanto deportivista, pero solo su mala puntería le privó de marcharse con un saco de goles, pues disparó hasta en siete ocasiones. No ha vuelto a igualar esta cifra y tan solo se acercó en la jornada inaugural contra la Real Sociedad, cuando llegó a los cinco remates. En la visita del Espanyol, en la que marcó dos, solo chutó tres veces.

Más acierto

Los partidos en Mestalla, Vallecas y contra el Espanyol, los de más éxito. En este partido, el último disputado en Riazor, Lucas sembró el pánico en la defensa espanyolista, al igual que en los encuentros contra el Valencia y el Rayo, también acertó con la portería contraria en dos ocasiones por partido. Por el contrario, se quedó sin chutar siquiera frente al Betis, cuando disputó la última media hora, y solo lo hizo en una ocasión en la última jornada previa al descanso contra el Granada.

Más toques

Su participación en el juego del equipo, síntoma de que algo no va bien. Mientras se está revelando como un goleador decisivo y letal, hay ocasiones en que al deportivista le pueden sus ansias de balón. Imprevisible para el contrario por sus múltiples recursos para el remate, no le ocurre lo mismo si abandona las proximidades de su medio natural, el área. Por eso, resulta sintomático que sus datos más altos de toques del balón señalen precisamente aquellos partidos que el Dépor perdió o igualó. Contra el Sporting (derrota) estableció su récord con 52, mientras frente al Valencia (47) y el Granada (48) no pasó del empate.

Con 4-4-2

Tres goles, pero menor media de remates y tan solo una victoria. Es evidente que el juego de Lucas se ve indefectiblemente afectado por el fútbol de su equipo. Así, las alternativas utilizadas por Víctor también tuvieron impacto en el rendimiento del delantero. De los cuatro goles con que alcanzó este segundo descanso liguero, tres llegaron desde un 4-4-2. En cambio, este sistema solo ha brindado al Dépor la victoria contra el Espanyol. En cuanto a su aportación personal, el coruñés promedia tres disparos por partido y uno entre los tres palos.

Con 4-5-1

Solo un gol, pero más remates y dos victorias para el equipo. El Dépor alcanzó sus otros dos triunfos a partir de un 4-5-1, donde Mosquera se incrusta entre los centrales para iniciar los ataques, mientras Juanfran (o Cartabia) y Luis Alberto (o Luisinho) ejercen de extremos hasta convertir el sistema en una suerte de 4-3-3. Lucas solo jugó dos partidos completos con este dibujo táctico (frente al Rayo y el Sporting), pues saltó al campo a media hora del final contra el Betis. El caso es que solo batió al equipo madrileño desde este dibujo táctico, pero en el cómputo global disparó más que nunca (casi cuatro veces por partido) y chutó entre los palos una vez de media.

Como delantero centro

Un puesto destacado entre los mejores rematadores de la Liga. Lucas disputó como referencia atacante las cinco primeras jornadas de Liga. De esos 450 minutos solo le faltaron un puñado en la segunda parte contra el Sporting, cuando actuó en banda antes de que, con la entrada de Cartabia, Víctor lo devolviese al centro junto a Jonathan. El coruñés se hizo un hueco en esas jornadas entre los más destacados artilleros de la Liga, por detrás de bombarderos como Ronaldo y Messi, pero a la par de otros como Nolito, Aspas o Aduriz.

Como mediapunta

Los dos goles al Espanyol, pero caída en la cifra de disparos y remates a portería. En la posición de mediapunta, aquella en la que jugó buena parte de la pasada temporada, el siete jugó las dos últimas jornadas contra el Espanyol y el Granada. En esta primera actuó por detrás de Riera para marcar dos goles, mientras en la segunda junto a Jonathan. Pese al fulgor de sus dos goles, en ambos casos, sus cifras globales de remates se resienten. El 9 es su verdadera alma.