Talante para el banquillo

Alexandre Centeno Liste
alexandre centeno A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

GONZALO BARRAL

El Deportivo busca un entrenador que recupere el gobierno del vestuario

31 may 2016 . Actualizado a las 13:48 h.

Una vez destituido Víctor Sánchez del Amo como entrenador del Deportivo, Tino Fernández ha ordenado a la dirección deportiva que se ponga manos a la obra para poner sobre su mesa una lista de tres candidatos a entrenar el primer equipo la próxima temporada. No será una decisión que se tome a la ligera. El presidente anunció que se hará «con calma» y pone de plazo, al menos, una semana para dar un nombre.

El mercado es amplio y muchos podrían ser los elegidos. Estas son algunas de las cualidades que se buscan en el nuevo inquilino del banquillo de Riazor.

1. Que tenga un proyecto futbolístico

No será requisito indispensable que el nuevo técnico apueste por un fútbol creativo. Se entiende que todas las propuestas son válidas, siempre y cuando vayan acompañadas de un proyecto y una defensa de esa idea futbolística.

2. Solo tendrá poder en la dirección del equipo

De la rueda de prensa de ayer de Tino Fernández quedó claro que el primer ejecutivo deportivo del club es Richard Barral. Su figura salió fortalecida en esta crisis y así será en el futuro. De esta forma, el nuevo entrenador no tendrá poder sobre otras parcelas que no sea la dirección del primer equipo. Se contará con él a la hora de confeccionar la plantilla, pero no será su misión. Su opinión será importante pero no la única. Del mismo modo, no tendrá potestad alguna sobre el segundo equipo ni la cantera.

3. Conocimiento de la Liga española

Un requisito imprescindible es que tenga un conocimiento de la Liga española. En algún momento de su trayectoria debe haber entrenado o jugado en esta competición. Principalmente entrenado. Y, también se tendrá muy en cuenta que su experiencia no se vaya muy atrás en el tiempo, como había sucedido en su día con Víctor Fernández.

4. Discurso coherente e ilusionante

Después de lo vivido en la última temporada, el entrenador que ocupe el banquillo de Riazor la próxima campaña debe tener un discurso coherente e ilusionante. Aunque su nombre no enganche en exceso de inicio, que sepa ganarse a la hinchada con su mensaje.

5. Se analizará el equipo de colaboradores

La mala experiencia vivida esta temporada con David Dóniga y Carlos Morales, provoca que la dirección deportiva vaya a estudiar también con detenimiento el equipo de colaboradores que los candidatos a entrenadores presenten en su proyecto. Se pretenden que los ayudantes sean nexos de unión y no generadores de conflictos en el vestuario.

6. Vital la gestión del vestuario

Tino dejó claro ayer que este año debe servir para aprender de los errores cometidos. En este sentido, la gestión del vestuario por parte del entrenador saliente es uno de los mayores que se observaron en el club coruñés. Por este motivo, se pondrá especial atención en el pasado del entrenador y cómo es su relación con los jugadores. Eso no significa que se busque un entrenador blando, sino que puede tener su carácter pero sabe convencer a los jugadores y contar con su respaldo.

7. Que mantenga la autoridad pero sin abuso del poder

La autoridad en el vestuario debe estar por encima de todo. Pero una cosa es eso y otra abusar de su poder. Es una premisa que manejan el club a la hora de elegir el nuevo entrenador. Se pretende evitar casos como los vividos a final de temporada con Lopo y Luisinho que fueron apartados del equipo, algo que acabó por afectar al vestuario.

8. Hombre de club y con hambre para crecer de la mano del Deportivo

Con Víctor Fernández se apostó por la experiencia. Con Víctor Sánchez por su deportivismo. La idea que se persigue ahora es la de un hombre de club, que tenga hambre y quiera crecer de la mano del club. Que se pueda plantear un proyecto a medio plazo de ir dando pasos al frente sin renunciar a nada.

9. Con personalidad pero flexible en la toma de decisiones

Se quiere un entrenador con personalidad. Que cuando hable, el vestuario lo escuche. Que sea un líder. Pero que ese liderazgo no le impida ser flexible en la toma de decisiones y sepa dialogar con su grupo antes de actuar.

10. Un técnico de habla hispana

No se quieren experimentos. Después de todo lo vivido, se busca, sobre todo, comunicación. Y para eso, se entiende que un aspecto importante es que el nuevo entrenador hable español. La plantilla que se confeccionará será en una amplísima mayoría de habla hispana, por lo que se entiende que el mejor modo de llevar el vestuario es que lo sea también el técnico.