El Villarreal vuelve a aprovecharse del reglamento para diezmar la cantera del Deportivo

TORRE DE MARATHÓN

Pablo Pereda, con el 5, durante un partido de División de Honor cadete entre el Deportivo y el Celta
Pablo Pereda, con el 5, durante un partido de División de Honor cadete entre el Deportivo y el Celta RCD

Se lleva a dos centrales demasiado jóvenes como para contar con ficha P y cuya salida deja tocada la base blanquiazul en un puesto especialmente difícil de reforzar

23 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

«Cada año nos roban los grandes equipos; tenemos la mejor cantera de España, por eso vienen todos a robarnos jugadores. Aquí lo denuncio. Me parece fatal que los grandes equipos vengan a robarnos jugadores de 15 años con contratos antes de llegar a profesional. Eso que conste y que se quede ahí. Barcelona, Atlético de Madrid y Athletic de Bilbao, uno cada uno». Hace cuatro años, en el intermedio de un encuentro, Fernando Roig se colocó delante del micrófono de Movistar para denunciar la fuga forzada de talentos desde la base de su club.

El Atlético le había limpiado a Germán Valera, extremo que en la campaña 22-23 militó cedido en el Andorra; el Athletic, a Nico Serrano, también especialista de banda que el curso pasado fue prestado al Mirandés; el Barcelona, a Brian Fariñas, mediocentro que aún retienen los azulgrana en su juvenil. Como castigo, el dirigente del submarino amarillo se negó a sentarse a la mesa con las directivas de los clubes señalados cuando jugaron en Villarreal. Si en A Coruña le aguantan el pulso, Roig tendrá imposible encontrar comensales si en el futuro (ojalá, cercano) acude al palco de Riazor.

En el verano del 2022, la cantera de la entidad que preside le arrebató al Dépor a Ioan Precup, mediocentro que entonces tenía 13 años y había pasado cinco enrolado en la base blanquiazul. También al meta Yago Moreira, usando al Coruxo de puente durante unas jornadas antes de vestirlo de amarillo. Como esta vez no hubo micros que registraran el malestar coruñés, el Villarreal ha vuelto a por más. Se hace ahora con dos chavales con recorrido en una plaza fundamental por la escasez que atraviesa la cantera de Abegondo, expuesta a un constante expolio de centrales antes de que lleguen a la edad en que pueden firmar un contrato profesional.

El Real Madrid se llevó también meses atrás a Jorge Oreiro, quien destacaba como lateral en el conjunto cadete, pero cuyas condiciones le convertían en recurso ideal para el eje de la zaga —para ese puesto lo querían en Valdebebas—. Al menos, el club blanco aceptó pactar una compensación importante, a la que no estaba obligado. Semanas más tarde, se marchó Lucas Taibo al Sporting de Portugal.

Perdía el Deportivo un central zurdo de 16 años, más de metro noventa y habilidades muy por encima del promedio de jugadores de su edad. Portador del 5 que heredó Pablo Pereda en el cadete A. Un nuevo zurdo espigado —a este aún le falta ganar cuerpo para los duelos— que hizo cinco goles en el campeón de su grupo de División de Honor. Tiene 16. Se va con los de Fernando Roig antes de poder contar con ficha P. Como Mateo Caamaño, zaguero sadense del 2009 que militó en el infantil. El Villarreal es pez grande. No llora más.