Desde la mediapunta, el mediocentro o la banda, el jugador que fue juvenil del club reclama con su fútbol y personalidad un rol importante en el Deportivo
15 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.El tren del Deportivo ha pasado de nuevo por el andén de Hugo Rama (Santiago, 1996). Si la indisposición de Barbero le abrió las puertas de la alineación, aquel día frente al Teruel sacó a relucir versatilidad, esa derecha de muchos quilates que calza y su carácter ganador para subirse a la espalda mientras las fuerzas se lo permitieron a un equipo en inferioridad numérica. Ahora reclama un puesto propio en el once de cara al choque del sábado (21.30 horas, FEF TV) en Salamanca contra el Unionistas. La sanción de Lucas Pérez impone la obligación de que Idiakez modifique de nuevo el once, pero el compostelano parece confirmado en cualquiera de las posiciones de un mediocampo que empieza y termina por él.
«Yo le ponía por la derecha, en lugar de Álex Corredera [actual jugador del Tenerife], pero metiéndose hacia dentro, y dio un rendimiento altísimo». Manuel Mosquera fue su primer entrenador en el Fabril. Rama había desembarcado en la ciudad deportiva de Abegondo desde el Sigüeiro, donde ya había llegado a debutar en Primera Regional, para ingresar en las filas del juvenil deportivista y, posteriormente, dio el salto al filial. Era ya por aquel entonces un jugador distinto, al que en principio le costaba entrar por el ojo derecho de los sucesivos entrenadores que tuvo. José Ramón, el propio Manuel y Cristóbal dieron oportunidades a otros antes que a él, pero Rama no se conformaba. «Si no jugaba, se enfadaba, pero no se vencía, ni se desconectaba. Es un ganador y se rebelaba trabajando e insistiendo», recuerda Manuel, que nunca dejó de seguir la trayectoria del actual jugador deportivista.
En su segunda etapa de blanquiazul, esta vez como retoque final a la plantilla del primer equipo, no necesitó período alguno de adaptación para ofrecer una muestra de su mejor repertorio. Si como mediapunta en sus primeros minutos en el Ángel Carro se quedó a un paso de marcar en una clara ocasión, el pasado domingo se le vio cubriendo mucho campo, iniciando jugadas, tomando el relevo de Lucas para poner en juego el balón parado, y hasta dando el pase final y liderando la presión en campo rival de su equipo.
La mili de Rama
«Hizo la mili en el Mirandés de Borja Jiménez, donde ascendió, y luego en el Lugo. Allí y con Álvaro Cervera en el Oviedo le hicieron correr una barbaridad, pero nunca se amilanó. Jugó por delante de la defensa, de interior, de mediapunta, en banda,... Y siempre con un rendimiento espectacular. Es un jugador con nivel de titular de Segunda División», añade Manuel, para quien aquella perla de calidad y fuerte carácter se ha transformado en todo un animal competitivo.
«Es un centrocampista total, con recorrido y regate, pero también buena pegada con la pierna derecha. Tiene un golpeo de faltas espectacular, que primero eleva el balón y después cae, como una folha seca. Ha progresado en muchos aspectos una barbaridad, pero sobre todo sigue siendo un ganador», subraya el técnico y exfutbolista blanquiazul, encantado con la presencia del que fue su pupilo en este Deportivo diseñado por Imanol Idiakez y Fernando Soriano.