La uci del Cunqueiro salva la vida a seis personas sacándoles la sangre

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

Una máquina consigue sustituir al corazón y al pulmón durante varios días

20 mar 2017 . Actualizado a las 12:43 h.

Sacar la sangre del cuerpo a una persona para curarla no es algo nuevo. La cirugía cardíaca no existiría sin la circulación extracorpórea: una máquina recoge la sangre del paciente, la oxigena y la bombea al resto del cuerpo. Hace las funciones del corazón y del pulmón para que los cirujanos puedan operar. El proceso dura unas pocas horas.

Ahora, en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Álvaro Cunqueiro han empezado a utilizar una técnica muy similar para curar a sus pacientes. La diferencia es que, en lugar de estar unas pocas horas con la sangre fuera del cuerpo, pueden estar varias semanas. Hay pacientes que han estado hasta tres semanas conectados a una máquina. La técnica se conoce como ECMO, las siglas en inglés de oxigenación por membrana extracorpórea. «Extraemos la sangre en la vena femoral [en la ingle] y la devolvemos en la vena o en la arteria yugular [en el cuello]», explica el intensivista Ignacio Chico. Se hace a pie de cama.

En el medio de ese puente está la máquina, que oxigena y bombea la sangre para devolverla al cuerpo. «Conseguimos sustituir la función del corazón, del pulmón o de ambos», dice el médico. Por el circuito externo circula alrededor de medio litro de sangre en todo momento. Todo la sustancia roja que contiene el cuerpo humano, que son unos cinco litros, acaba pasando por la máquina al cabo de un minuto.

La uci del Álvaro Cunqueiro trató con ECMO a su primer paciente hace un año. Desde entonces han pasado siete. Seis de ellos sobrevivieron. «Son pacientes que estaban prácticamente desahuciados», subraya el médico Santiago Freita. Sin la máquina, no se habrían salvado. Esto explica mucho: la ECMO se reserva a aquellas personas en las que todas las demás terapias han fallado.

«Tenemos dos pacientes clásicos: el infarto de miocardio y el distrés respiratorio por gripe A», añade Chico. En el primer caso, el corazón no bombea sangre y la ECMO sirve para que el músculo cardíaco se recupere hasta que pueda hacer su función. En cuanto a la gripe, los pacientes suelen fallecer por una inflamación masiva del pulmón, así que la técnica permite dejar en reposo este órgano respiratorio mientras se cura. En ambos casos, si el órgano no trabaja, se trata mejor. «Esto nos sirve para ganar tiempo, porque hay lesiones de corazón y pulmón que son incompatibles con la vida», dice la también intensivista Eva Menor.

Esos pacientes antes se morían y ahora se les da una esperanza. «Se calcula que solo el 20 % sobrevivirían sin la ECMO; con ella se llega al 80%, advierte Freita. Para Ignacio Chico, no existe ninguna técnica de uci que hayan cambiado tanto las perspectivas de supervivencia desde la ventilación mecánica -intubar a un paciente para que respire con la ayuda de una máquina-.

El Cunqueiro lleva un año con la técnica y ha tratado a siete personas, varios de ellos con gripe A. De alguna forma, ha sido el año de pruebas, después de otros dos años previos en formación. «Estuvimos en París, en Leicester, en San Diego, en Toronto...», rememora Ignacio Chico. Han ido a hospitales que están entre los diez del mundo con más experiencia en ECMO, una técnica que empezó a generalizarse en el 2010. Y van a ir a más. Últimamente, ayudaron a formar al personal de Santiago, que acaba de implantar la técnica.

Por lo tanto, van siete pacientes. Pero llegarán a más. La jefa de servicio de Medicina Intensiva, Dolores Vila, calcula que «la uci no debería bajar de veinte pacientes anuales con esta técnica, porque sus beneficios son evidentes».

El hospital de Vigo atenderá a pacientes de Ourense

Ahora que la técnica ECMO ya tiene un año de rodaje, la uci del Chuvi se ha marcado tres grandes objetivos a medio plazo, para tratar a pacientes a los que ahora no se trata. Un grupo de esos pacientes lo forman los que viven en Ourense. El hospital de Vigo es la referencia para toda esa provincia en aquellos procedimientos que el hospital ourensano no practica. Recientemente, el Sergas decretó la referencia para la técnica de circulación extracorpórea en la unidad de críticos. Los ucistas de Vigo reconocen que quieren establecer un protocolo con la uci de Ourense para que esta le derive a los pacientes susceptibles de ser tratados con esta técnica. Son enfermos muy graves y los intensivistas se inclinan más por ir a buscarlos a Ourense y aplicarles la circulación extracorpórea antes del traslado, y no al revés. El Cunqueiro ya trató un paciente con gripe procedente de Ourense en el último año.

Otro de los proyectos pendientes es aplicar la ECMO en parada cardíaca, que sería ir un paso más lejos de la misma técnica en el infarto de miocardio. Especialmente, cuando se produce una parada cardíaca dentro del hospital, la uci aspira a intervenir no solo con un desfibrilador, sino también con la ECMO.

El tercero es la idea de promocionar la donación en asistolia. Normalmente, la donación de órganos se produce en muerte cerebral: la persona ha fallecido, pero la sangre aún circula. Pero existe también la donación en asistolia, que es cuando el corazón se para. En la uci consideran que con la técnica ECMO se podría desarrollar mejor esta variante, y ya están trabajando en un protocolo para generalizarla.