Un vigués al mando del surf europeo

VIGO

CEDIDA

Gony Zubizarreta lidera el circuito después de ganar dos pruebas seguidas por primera vez en su carrera

25 abr 2017 . Actualizado a las 08:32 h.

De la cama directo al mar para terminar en lo más alto del podio. El surfista vigués Gony Zubizarreta ganó este fin de semana la Pro Zarautz 2017 tras haber estado enfermo la víspera. «Fue cansancio acumulado, llevaba varios días sin parar haciendo un montón de cosas. Pero cuando te recuperas siempre vuelves más motivado y no puedo estar más feliz», dice. No solo por esta victoria en sí misma, sino también porque es la segunda consecutiva tras haberse impuesto el pasado fin de semana en la Caparica Primavera Surf Fest. Es la primera vez en su carrera que vence en dos pruebas consecutivas del circuito europeo.

«En las primeras mangas estaba débil, pero cada vez iba a más y para la final ya me encontraba al 100 %», dice el vigués nacido en Argentina y residente desde hace varios años en Portugal, pero que además tiene en Zarautz su segunda casa tras Galicia. «Desde pequeño iba allí en verano y es un sitio que conozco y donde he surfeado mucho. Había ganado en el 2009 y volver a hacerlo ahora es especial y más si le sumamos que nunca antes había ganado dos pruebas seguidas y que venía de estar enfermo», analiza.

Ayer se dirigía directamente a Santa Cruz pensando ya en una nueva competición. «Voy donde me llevan las olas», proclama el deportista, de 31 años. Y así ha visto medio mundo, o más. «He estado gracias a este deporte en sitios que nunca hubiera imaginado: Australia, Indonesia, Marruecos, Brasil, Sudáfrica, Mozambique, Canadá, Namibia, Estados Unidos... Pero me quedo con Hawai. Es como La Meca, lo máximo para quien practica este deporte».

Los siguientes destinos que le esperan incluyen Francia en dos ocasiones y de nuevo Portugal, entre otros, de cara al objetivo final que se ha propuesto de ser campeón del circuito europeo. «Van tres pruebas. Fui quinto en la primera, en Israel, y ahora llevo dos primeros puestos. Todo está fluyendo mejor que nunca y claro que aspiro a ganar. Aunque queda mucho por delante y va a ser duro, quiero intentarlo y sobre todo seguir disfrutando del surf».

Vive su mejor momento tras más de 20 años practicando un deporte en el que, con etapas críticas de por medio, no ha dejado de crecer. «Me conozco mejor, compito más tranquilo. Hubo un momento en el que me presionaba demasiado a mí mismo y psicológicamente me afectó, competí peor por eso. La mente en este deporte es importantísima», reivindica.

Su gran meta para esta temporada pasa también por otra no menos importante: ganar en Pantín. «Siempre quieres hacerlo bien delante de tu gente y el año pasado no pude. Influyeron muchos factores y me quedé fuera en la primera ronda». Y como siempre que le pasa eso, piensa en remediarlo en el mismo sitio en la siguiente oportunidad. «Nunca me planteo dejarlo ni rendirme, siempre tienes la esperanza de que la próxima salga mejor. Yo sueño con llegar a ser un señor mayor que siga surfeando», avisa.

Sus inicios fueron a los siete, de la mano de su padre en Patos. «No teníamos ni traje y pasábamos un frío tremendo, ¡pero lo que nos divertíamos!», rememora entusiasta. Su evolución desde ese momento le llevó a vencer el mundial sub-18 y ahí fue cuando se dio cuenta de que podía «llegar a ser profesional del surf», comenta.

Ahora cumple diez años situado de manera ininterrumpida entre los cien mejores de la disciplina. «Aquella victoria era un paso importante. Me dio fuerza y confianza, supe que podría seguir», recuerda. También fue la manera de ponerse en el mapa y conseguir los espónsores, un factor imprescindible para «un deporte carísimo» que para él significa su «vida entera».