Freire repara el Xarifa 1927, el velero centenario que inspiró un premio Pulitzer

Alejandra Pascual Santiago
alejandra pascual VIGO / LA VOZ

VIGO

El astillero vigués repara el casco de la goleta, con bandera de Malta, en las instalaciones de Beiramar.
El astillero vigués repara el casco de la goleta, con bandera de Malta, en las instalaciones de Beiramar. M.MORALEJO

Encargado por el heredero del imperio de las máquinas de coser Singer, fue escenario de una película con Orson Welles

03 nov 2023 . Actualizado a las 00:41 h.

En 1927, el astillero británico JS White & Co culminaba el encargo del heredero del imperio de máquinas de coser Singer, Franklin Morse Singer. Sobre las aguas de la isla de Wight arrancaba la travesía del Xarifa 1927, un velero construido sobre un casco de acero de 43 metros y equipado con tres mástiles de aparejo de goleta, uno de los detalles más significativos de su silueta. En aquella prueba de agua, comenzó toda una singladura que convertiría el barco en testigo y protagonista de casi un siglo de historia. Esta joya naval, que cuenta con más de 95 años de navegación y cuyo nombre significa «dama encantada» en árabe, ha ido a parar a las gradas del astillero vigués Freire Shipyard, que se encarga de su reparación y labores de mantenimiento.

Las instalaciones de Beiramar albergan el Xarifa 1927. Sobre una plataforma elevada, una cuadrilla de trabajadores del astillero repara minuciosamente estos días la cubierta del velero. Los icónicos mástiles también están siendo objeto de trabajos y en los últimos días los han cargado en los muelles para su mantenimiento. La goleta se dejó ver el pasado verano por la ría de Aldán y el puerto de Sanxenxo, generando miradas de admiración. Ayudaba el tamaño de sus seis velas blancas desplegadas, que miden cerca de 1.400 metros cuadrados.

M.MORALEJO

Puede considerarse el barco de las mil historias. Tres años después de recibirlo, la familia Singer decidió venderlo a Edward Mauger, oligarca de la prensa británica y accionista del diario matutino The Telegraph, quien decidió cambiar el nombre por Radiant. No sería esta la única relación del Xarifa con la industria periodística, sino que justo antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial, el velero pasaría a manos de Samuel E. Morrison. El profesor de la Universidad de Harvard se inspiró a bordo para esscribir Admiral of the ocean, una biografía de Cristóbal Colón merecedora de un premio Pulitzer por «replicar científicamente el viaje a modo de investigación empírica».

En manos de Traglio

En la década de los cincuenta, el buque estuvo al servicio de la investigación oceanográfica y fue bajo la propiedad de Hans Hass cuando creció hasta los 47 metros de eslora. Sus mástiles también medraron hasta alcanzar el mayor una altura de 33 metros. Fue a topárselo casi diez años más tarde el magnate italiano Carlos Traglio (cuya fortuna se relaciona con Coca Cola) en el puerto de Singapur. El empresario lo convirtió en su residencia entre 2002 y 2008 con base en el puerto de Mónaco, después de haberlo cedido como escenario de películas. Una de ellas fue El marinero de Gibraltar, protagonizada por Orson Welles y Jeanne Moreau.

El Xarifa ha desembarcado en la industria naval de Vigo convertido en un velero de cincuenta metros de eslora y dedicado a charter, con espacio para doce pasajeros y nueve tripulantes. En el 2016, la propiedad del velero encomendó a otro astillero vigués, Metalships, su modernización. En esta ocasión han apostado por que lo haga Freire, que es la empresa naval con más carga de trabajo de la ría.