La avalancha de solicitudes para puestos retrasa los mercadillos de Vigo tras nueve meses
VIGO CIUDAD
Estaba previsto que, tras suspenderse por el tiroteo entre vendedores en octubre pasado en Cangas, reabriesen sus puertas el 3 y 6 de julio
30 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Los dos mercadillos de Vigo, Bouzas y Coia, que fueron suspendidos tras un tiroteo entre vendedores en octubre pasado en Cangas, no reabrirán sus puertas el 3 y 6 de julio, respectivamente, como estaba previsto. El Concello de Vigo ha justificado el aplazamiento por la recepción de 500 solicitudes de vendedores que desean instalar sus puestos.
Debido a esta avalancha, el gobierno vigués ni siquiera ha dado una fecha alternativa. Explica que primero «ten que revisar toda a documentación antes de publicar unha lista provisional de admitidos; despois abrirase un prazo de subsanación de erros e publicación da lista definitiva».
Todavía antes de la apertura, el Concello llevará a cabo un doble sorteo si los admitidos superan el número de puestos, más un segundo para repartir la localización de cada uno de ellos. Completado el procedimiento, extenderá tarjetas de autorización y se abrirán ambos mercadillos.
Por lo tanto, se trata de un trámite administrativo largo que coincide, además, con el verano, con parte de la plantilla municipal de vacaciones y sin tiempo material para tramitar las solicitudes. Además, al ser obligatorio guardar los plazos de exposición pública después de los sorteos, podría ocurrir que la apertura de los mercados se demore a lo largo del verano.
El tiroteo de Cangas desencadenó la guerra de los clanes, que se venía larvando desde hacía años, con expulsiones de grupos de gitanos de Galicia. Cuando surgió el conflicto, el Ayuntamiento decidió suspender todas las ferias sine die. En otros municipios las cancelaciones fueron temporales.
El conflicto violento entre los vendedores de los mercados, no obstante, se vio reducido en las últimas semanas tras el encarcelamiento del clan de los Morones. En abril, en la operación Vida, la Guardia Civil detuvo al denominado rey de los gitanos, Olegario Jiménez, de 69 años, y a sus hijos -Saúl, Sinaí, Juan Paulo y Marino- como supuestos cabecillas de una organización de extorsión a los vendedores de los mercadillos.
Autorización municipal
Creados hace 26 años, era una asociación de vendedores la que daba la autorización y cobraba la cuota de instalación, quedando el Concello de Vigo al margen.
Precisamente, la exigencia del alta en la Seguridad Social de los vendedores y otros requisitos legales provocó enfado entre algunos vendedores, que vaticinaron que no habría demanda. Ha ocurrido justo lo contrario, provocando un retraso inesperado en su reapertura. A partir de ahora será el Concello de Vigo el que dé una tarjeta de autorización a los vendedores para tener sus puestos montados.