El alcalde da «libertad total» al tribunal para anular o seguir adelante con las oposiciones de policía local

Será el tribunal que dirige la ejecución de las oposiciones para cubrir por turno libre 18 plazas de policía local de Vigo el que tome la decisión sobre mantener el proceso o dar marcha atrás tras los recursos presentados por docenas de opositores suspendidos en la primera prueba. El alcalde descartó ayer que esta medida vaya a tomarla la Junta de Gobierno Local, que ayer se reunió sin abordar dicho asunto.

«Tienen libertad total, son soberanos para decidir qué hacer y cómo hacerlo», afirmó Caballero en rueda de prensa.

La incertidumbre ante esta decisión tiene de los nervios a unas 300 personas; de un lado, los 193 que suspendieron (que recuperarían sus opciones) y de otra los 96 que aprobaron, especialmente los que quedaron en los primeros lugares y tendrían relativamente fácil acceder a un puesto fijo a expensas de las pruebas pendientes.

De momento, el tribunal lleva más de dos semanas estudiando la situación sin que haya llegado a una conclusión. La única, forzosa, aplazar el examen de gallego, que estaba previsto para el pasado día 15, y las pruebas físicas, que iban a tener lugar el martes y miércoles de esta semana.

Respecto al tribunal, lo único que se conoce es que no existe unanimidad entre sus integrantes. Fuentes municipales mantienen que uno de ellos es abiertamente favorable a su anulación, lo que ha plasmado por escrito una vez analizados los recursos, mientras se ignora la posición de los demás.

El tribunal está presidido por el responsable de la Policía Local de Vigo y actúa como secretario un licenciado en Derecho del Concello. El resto de los miembros son foráneos. Se trata de tres vocales pertenecientes dos de ellos a la plantilla de la Policía Local de Mos y el tercero a la de Cambre. Inicialmente figuraba un agentes de Ferrol, pero la víspera del examen se notificó su sustitución, por lo que se incorporó el suplente, de Mos.

Precisamente, el motivo principal de los recursos es una supuesta relación de amistad entre algunos de los aspirantes aprobados y los miembros del tribunal de Mos, a los que conocieron mientras ejercían el pasado verano como auxiliares en este municipio.

Las oposiciones para cubrir estas 18 plazas fueron convocadas por el Concello vigués en los años 2010 y 2011, pero hubo sucesivos retrasos que provocaron indignación entre los afectados. Debido a ello los exámenes revisten un especial nivel de tensión.

El tribunal lleva más de dos semanas revisando los recursos presentados

A la espera de la decisión se ha suspendido el examen de gallego y la prueba física

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