La recaudación de los juzgados de Vigo se desploma al perder pleitos de tráfico

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Además, muchos condenados prefieren trabajos sociales a pagar las multas

26 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El dinero que recaudan los juzgados de Vigo en concepto de pago de indemnizaciones o multas se ha desplomado en apenas dos años. Las cuentas bancarias de depósitos y consignaciones de los tribunales de la ciudad y del resto de la provincia registraron la entrada de 134 millones de euros en el 2016, muy por debajo de los 170 millones recaudados en el 2014. Es la cifra más baja del lustro, algo más de 1.120 euros de media por pleito.

La clave de esta caída está en la reforma legal que ha suprimido los juicios de faltas por lesiones leves en accidentes de tráfico. Un choque por alcance en una rotonda, por ejemplo, tiene que tramitarse ahora por la vía civil, lo que supone mucho más gasto para los demandantes, que se ven obligados a contratar peritos privados cuando antes disponían de un informe forense gratis. Esto ahuyenta a los litigantes que buscaban una indemnización rápida denunciando al otro conductor.

La ley ha eliminado las faltas por accidentes leves y solo algunos perjudicados que iban por la vía penal han optado por desviar su demanda al ámbito civil. En el procedimiento penal el informe del forense salía gratis y el accidentado no perdía nada por reclamar. Pero ahora solo le queda la vía civil (salvo si la imprudencia vial es un delito) y el litigante debe pagar de su bolsillo a un perito privado para que evalúe sus lesiones. Cada año hay más juicios de tráfico por lo civil (superan los 1.200 pleitos) pero las centenares de denuncias que entraban en los juzgados de instrucción se han volatilizado. «Lo que son accidentes en las rotondas ya no vienen aquí», dice una jurista de instrucción. En el 2016, solo se tramitaron 96 casos por delitos leves de tráfico.

Cuando una aseguradora o un condenado pierden un juicio tienen que abonar por orden judicial una indemnización, las costas o una multa se ven obligados a ingresar el dinero en el número de cuenta bancaria de los juzgados de Vigo. La Administración devuelve la mayoría de esos fondos al litigante que gana el pleito porque es lo que le corresponde.

Los expertos consultados entrevén más razones para la caída de la recaudación. Otra explicación es que, según señalan diversas fuentes, los condenados prefieren hacer trabajos en beneficio de la comunidad que abonar una multa. Esta elección reduce las cuantías que ingresa la Administración. Las multas suelen ser de mil euros o más y algunos no las pueden pagar. Fuentes de instrucción confirman que el tribunal impone trabajos a los que no pagan sus multas.

Otros también recuerdan que la litigiosidad en Vigo ha descendido un 30 % en el último año, lo que incluye un descenso de los pleitos que mueven más dinero, como la reclamación de deudas o las indemnizaciones. Por ejemplo, en el 2014 hubo 5.574 demandas monitorias (reclamaciones de cantidad exprés) pero en el 2016 solo se presentaron 5.030. Lo mismo pasó con las ejecuciones hipotecarias o anulaciones las preferentes (de 1.180 pleitos se bajó a 268).

Fabián Valero: «Ha descendido la litigiosidad o la cuantía de los procesos»

El abogado Fabián Valero luchó durante años contra las tasas judiciales, concepto por el que Hacienda llegó a recaudar más de tres millones de euros al año durante el tiempo en que este gravamen estuvo vigente en Vigo. En su opinión, el descenso de los depósitos y consignaciones de la cuenta judicial no tiene relación con la supresión de las tasas para los particulares porque se ingresan en la Agencia Tributaria.

Valero sospecha que el desplome de la recaudación procede de otros conceptos. «Es posible que haya bajado la litigiosidad o la cuantía de los procesos. Otra causa quizás sea el descenso de asuntos en lo civil», afirma este letrado especializado en laboral.

Fuentes consultadas atribuyen el descenso de los depósitos a los cambios producidos en la jurisdicción penal. «Ahora, en lo penal, casi todos los condenados en lugar de pagar acaba pidiendo trabajos en beneficio de la comunidad, según el delito y que no seas reincidente. Ahora, los trabajos se cumplen de verdad», dice una jurista. Añade que «lo que sí se notó mucho fue el bajón de los temas de tráfico de instrucción, que era una manera rápida de los accidentados de obtener indemnizaciones. Ahora, muy pocos llegan a la vía civil».

Las empresas consignan

El problema afecta más que nada a las compañías porque consignan el dinero para evitar el pago de intereses del 20 % pasados dos años de plaza. «De lo contrario, el pleito, si pierden les costaría una fortuna. Los particulares evitan hacer consignaciones porque están en tiempos de vacas flacas».