La caracola de Cabo Home, testigo de una historia de amor

mila méndez / emilio cerviño CANGAS / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Mila Méndez / Emilio Cerviño

Un pianista surcoreano tuvo un flechazo con la costa canguesa, donde conoció al autor de la ya mítica escultura

22 abr 2017 . Actualizado a las 13:15 h.

Dice Chang-Rok Moon que no cree en las casualidades, pero la vivida por el pianista surcoreano es lo más parecido a una señal del destino. De todos los paisajes que le regalaron sus giras por el mundo, el de la puesta de sol de las Cíes desde Cabo Home es su favorito. «Me quedé extasiado por su belleza. Es mágica, me transmite algo así como el inicio de la creación. La atmósfera, la luz... Y pensé, quiero formar parte de esto». «Cuando me vaya deseo que esparzan por aquí parte de mis cenizas», señala.

Chang, que trabaja como profesor en el Conservatorio Superior de Música de Valencia, reserva una porción para su otro destino predilecto, el Valle de Arán. «Vine por primera vez a Donón durante un atardecer y desde entonces repito siempre que vengo a Galicia». Eso sí, solo trae a los más cercanos. «Tampoco quiero hacerle mucha publicidad», bromea. Pero el pianista tenía una espina clavada con la caracola, la icónica pieza de acero que preside el mirador. «Me siento en armonía con ella y me decía: ‘¡Cuánto me gustaría conocer al escultor!’». Y... ¡deseo cumplido! Mientras Chang disfrutaba de una tarde por la Costa da Vela, escuchó cómo VTelevisión le estaba realizando una entrevista al autor de la obra, el cangués Lito Portela. Y lo buscó. «É moi grato coñecer a alguén que aprecie o teu traballo», reconocía un abrumado Portela. Su caracola, en realidad una buguina, ha enamorado a centenares de personas desde su colocación en el 2004. En algunos casos, tanto amor incluso ha sido contraproducente al apoyarse demasiados en ella. Lito sabía de esta pasión hacia su espiral inspirada en el Monte do Facho por las fotos que inundan las redes sociales. Sin embargo, algo muy diferente es recibir las felicitaciones en directo. «Es un honor conocerlo», le repite Chang. Lito le resta importancia al efecto de su pieza. «O bonito de verdade é Cabo Home. Cando a deseñei, nos primeiros bosquexos, tiña claro que o último que quería era agochar as vistas», detalla Lito, «mesmo as pedras nas que se apoia estaban aquí antes ca caracola». Tras escucharlo Chang ya sabe un poco más sobre la figura. Con ella como testigo asistimos a lo que creemos es el inicio de una nueva amistad. Chang, que tocó en Vigo este viernes, ha invitado a Lito a uno de sus conciertos.