La Xunta y el Concello se lavan las manos en la plaga de termitas

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

El Consorcio del Casco Vello recomienda una empresa y el alcalde ofrece apoyo

13 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Ni la Xunta ni el Concello han pagado por ahora ninguna actuación, en inmuebles particulares, contra la plaga de termitas que asola el centro. Tampoco tienen previsto hacerlo en el futuro. El alcalde, Abel Caballero solo brindó ayer su ayuda a los damnificados, aunque sin mayor concreción: «Son edificios privados y los propietarios tienen que aplicar los tratamientos que correspondan. Si necesitan nuestro apoyo estamos a su disposición», señaló ayer el regidor.

El alcalde recordó que el propio Consistorio sufrió este problema en uno de sus edificios, al Escola de Artes y Oficios «que tuvo que estar cerrado durante un año para proceder a un tratamiento completo».

Cuando empezó a detectarse el problema, que se ha extendido en los últimos meses, el Consorcio del Casco Vello convocó a una reunión en el salón de actos del centro de interpretación de las Islas Atlánticas para todos los vecinos de la zona alta con el fin de intentar dar respuesta a cuestiones sobre las actuaciones que se están llevando a cabo en el barrio con la rehabilitación de diferentes edificios. En dicho encuentro se abordó el problema de las termitas y se explicó el tratamiento que hay que realizar. Pero de apoyo económico, nada. El consorcio lo único que hizo fue facilitar el contacto de la empresa Agronerga, que es la que realiza la mayor parte de las intervenciones de este tipo en el Casco Vello, aunque hay otras que se dedican a esta tarea y también han actuado en el barrio. En esa reunión el ente público puso de relieve que, dada la necesidad de actuar desde el interior de las viviendas para conseguir una mayor eficacia del tratamiento, «la colaboración vecinal es imprescindible».

Meses después y ante el desborde del problema, son los vecinos los que reclaman la colaboración institucional.

La Xunta señaló que se ha detectado la presencia de termitas en algunos edificios propiedad del consorcio en la zona alta del Casco Vello y «al igual que el año pasado se ha actuado de manera diligente». Según la Administración autónoma, «una empresa contratada a tal efecto se encarga de forma permanente de controlar la situación y actúa mediante cebos cuando detecta la presencia de termitas para eliminarlas». La Xunta no sabe cuántos edificios están realmente afectados y admite que «por lo menos hay dos que son propiedad pública».

Jorge Portela, presidente de una de las comunidades de afectados en la calle Elduayen no entiende la falta de ayuda económica y aceptaría que pueda establecerse un copago para combatir la plaga. Cree que existe una responsabilidad institucional por seguridad y salud pública. «Un problema es la falta de mantenimiento de inmuebles y solares abandonados en la parte inferior del casco histórico. Si el edificio que tiene al lado se encuentra en mal estado se convierte en un foco de infección y fácilmente las termitas pasan de un inmueble a otro».