La jueza bloquea en el puerto el molino que genera energía de las mareas

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Ordena embargar los equipos de la plataforma de Magallanes por su litigio con Cardama

24 jun 2017 . Actualizado a las 12:17 h.

Los primeros ensayos generales de Atir, el molino flotante que persigue generar energía a partir de las mareas, botado el pasado 21 de abril en aguas de la estación marítima y diseñado por la empresa Magallanes Renovables, tendrán que seguir esperando.

La titular del juzgado de primera instancia número 7 de Vigo ha emitido un auto en el que dispone, además del embargo cautelar de parte de los equipos instalados en la infraestructura flotante, la inmovilización del artefacto. Con este fin ha remitido sendos oficios a la Autoridad Portuaria y a la Capitanía Marítima «para que tomen nota del embargo y adopten las medidas oportunas para impedir la salida de la plataforma», que está atracada en el muelle del Areal.

La decisión judicial se produce tras una petición de Cardama para que se adopten las medidas necesarias que garanticen que el artefacto no se mueva de Vigo en tanto no se sustancie el litigio que el astillero mantiene con Magallanes Renovables. El primero acusa al segundo de romper de forma unilateral la alianza que ambos firmaron el 25 de abril del 2013 para construir un trimarán con el mismo fin que Atir, cuya construcción encargó a la auxiliar del naval Ganain. Dicha ruptura se produjo cuando el trimarán en cuestión, que permanece atracado en Bouzas, ya estaba hecho y solo faltaba la dotación tecnológica.

La jueza ha echado mano del artículo 733 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LEC) para adoptar las medidas cautelares sin dar audiencia previa a la parte demandada como es habitual. El citado artículo admite que, «excepcionalmente, pueda acordarse sin dicha audiencia cuando concurran razones de urgencia o cuando la audiencia previa pudiera comprometer el buen fin de la medida». En definitiva, quiere evitar que la nueva plataforma, en la que se han instalado los materiales inicialmente destinados al trimarán pactado con Cardama «puedan abandonar el puerto de Vigo».

Acuerdo vigente

Hay que tener en cuenta, y así se recoge también en el auto, que el mismo juzgado ya emitió una sentencia a principios de abril en la que se declaraba «la plena vigencia del acuerdo de colaboración» que suscribieron en su día las partes y condenaba a Magallanes Renovables a dar «cumplimiento a las obligaciones derivadas del mismo». La firma redondelana presentó un escrito de recurso contra dicho fallo la pasada semana, después de que la jueza desestimara una aclaración de sentencia que todo indica, según fuentes jurídicas, que «lo único que buscaba era dilatar el proceso».

Señala la titular del juzgado de primera instancia número 7 que fue precisamente en la citada vista de abril donde dos de los testigos «reconocieron expresamente que los repetidos materiales iban a ser instalados en nueva plataforma distinta a la diseñada por CNV (empresa que también participó en el proyecto) y construida por la mercantil Cardama S.A.».

La jueza señala que si bien contra el auto no cabe recurso, Magallanes Renovables dispone de 20 días para formular oposición a la urgencia de las medidas cautelares adoptadas.