La mujer hallada en una maleta en Vigo recibió una puñalada

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

La Policía Científica recogió muestras en el lugar donde apareció la maleta con el cadáver
La Policía Científica recogió muestras en el lugar donde apareció la maleta con el cadáver Xoán Carlos Gil

El mal estado del cuerpo complica su identificación. A la policía no le constan desapariciones en la ciudad y su entorno durante el pasado verano

24 feb 2024 . Actualizado a las 13:33 h.

Ni edad, ni origen étnico ni nombre. Es un auténtico enigma. El mal estado del cuerpo de una mujer hallado el jueves dentro de una maleta abandonada entre la maleza en Vigo va a dificultar su identificación. Esto se debe a que han transcurrido entre siete y ocho meses desde que el cadáver de una mujer fue depositado en una pequeña escombrera en la calle Espedrigada, a solo 500 metros del estadio de fútbol de Balaídos. Fuentes jurídicas asumen que el análisis de los restos humanos será complejo, difícil y llevará mucho tiempo, sin garantías de que se obtengan resultados porque el cuerpo está muy degradado. Sin embargo, los primeros datos de la autopsia revelan que la mujer recibió una puñalada o, al menos, hay trazas de un arma blanca. El Juzgado de Instrucción número 4 de Vigo, en funciones de guardia, aún no lo dictado una resolución que confirme oficialmente la acción violenta.

Este caso recuerda al del hombre portugués hallado en un pozo en O Porriño y que requirió un largo estudio antropológico y la realización de un retrato robot para identificarlo.

La extracción de ADN será clave en el caso de la maleta de Vigo, pero surge el problema de que se trate de una persona sin fichar y no se pueda cotejar su perfil porque no figura en el banco de datos policial. Incluso podría tratarse de una persona extranjera, con lo que la investigación sería todavía más ardua.

Al inicio de la investigación ni siquiera estaba claro si se trataba de una mujer, aunque se intuía que sí por su anatomía. El cuerpo apareció íntegro, salvo alguna parte que se hubiese desmembrado cuando se introdujo el cadáver dentro de la maleta, de gran porte y de color gris que luego plastificó. Entre la fuerza ejercida para encajar el cuerpo y la acción de los insectos es probable que hubiese desmembrado accidentalmente algún miembro corporal, pero ya está comprobado que no fue descuartizada.

Otra incógnita es si la víctima presenta señales de violencia, pero eso exigirá limpiar el cadáver y examinar el esqueleto en busca de fracturas o lesiones mortales. Los forenses del Imelga trabajan en el Hospital Nicolás Peña en la limpieza y preparación del cuerpo.

Otro de los objetivos es averiguar la identidad de la víctima, por lo que se está intentando obtener huellas dactilares (lo que se ve casi impracticable por la degradación de los tejidos, aunque sus dedos podrían enviarse a Madrid para que sean analizados en un laboratorio especializado) o un análisis de ADN que se podría obtener de las uñas o del pelo. Tampoco consta que se haya encontrado documentación o carné de identidad o pasaporte de la fallecida.

La investigación ni siquiera tiene pistas sobre si la mujer es de origen caucásico (europeo) o de otra etnia. Lo que sí se ha verificado es que la víctima no estaba ataba con bridas o estas desaparecieron por la degradación.

La Policía Científica también examina un colchón y las bolsas de plástico que aparecieron junto a la maleta.

No constan desapariciones activas en la ciudad y su área en agosto del 2023

Los investigadores han repasado la lista de desapariciones en el área de Vigo en los últimos ocho meses. Solo siguen dos búsquedas activas, una de una mujer mayor en Arcade, en Soutomaior, y otra en el barrio de Teis, pero ambas se remontan a año y medio o dos años. Por eso, las fuentes jurídicas no descartan que se trate de una persona que no residía en Vigo o que lo hacía en precario, por ejemplo en una casa okupa. También cabe la posibilidad de que se trate de alguien que no estaba registrado en el país o que carecía de familia que denunciase su desaparición.

Lo insólito es que el lugar elegido para deshacerse de la maleta está enclavado en una zona semirrural, repleta de casas unifamiliares y fincas, y rodeada de edificios altos. Esto podría delatar que el desconocido que arrojó la maleta conocía el sitio y quiso deshacerse cuanto antes de su contenido.

La maleta, tipo trolley o carrito de la compra, fue vista en agosto por la inquilina de una casa contigua y el lugar era conocido por los vecinos como escombrera. El escenario, que no era visible desde la carretera o la acera, fue descubierto por un repartidor que había ido a orinar. En cuanto al recubrimiento con plástico de la maleta, aunque inicialmente se pensó que podría ser un embalaje de aeropuerto, no es necesario usar una máquina de aeropuerto. En Vigo, de hecho, no hay.