Unos ladrones queman un bar al intentar reventar una tragaperras con un soplete

E. V. Pita VIGO

VIGO CIUDAD

Xoán Carlos Gil

El incendio en el bar O Currunchiño, entre Coia y Bouzas, en Vigo. «No ardió la casa de arriba de milagro», dice el dueño. Es el tercer robo que sufre

22 mar 2024 . Actualizado a las 17:09 h.

Unos ladrones provocaron un incendio en el bar O Currunchiño esta madrugada al intentar reventar una máquina tragaperras con un soplete de cocina o un mechero. La llama de la herramienta prendió en la tela de una cortina y se extendió al dispensador de apuestas. A consecuencia del incendio, ardió toda la máquina, así como el televisor que estaba posado encima. «Non ardeu a casa de arriba de milagro», dice el dueño del establecimiento, que en la mañana de este viernes supervisaba los daños en su local. Es el tercer robo que sufre. Hace un mes, los ladrones usaron el mismo truco para desvalijar su máquina. El contratiempo le genera un problema a unos días del inicio de la Semana Santa y a las puertas del fin de semana.

Después de todo el estropicio causado, los ladrones huyeron sin botín. «Todo este cristo para nada», lamentó el propietario Gerardo Leidós.

Xoán Carlos Gil

El fuego comenzó a las cinco de la madrugada en el número 231 de la calle Tomás A. Alonso, situado entre los barrios de Coia y Bouzas. Los ladrones rompieron el cristal de la ventana desde la calle y metieron el brazo por el hueco para tocar la máquina tragaperras y manipularla. 

XOAN CARLOS GIL

Con el brazo metido por el hueco de la ventana rota, encendieron un soplete de cocina o mechero,«algo que botaba lume», para abrir el cajetín del dinero pero todo les salió mal porque no contaban con que el dueño, tras sufrir un robo 20 días antes, la hubiese anclado a la pared como precaución. Por ello, los delincuentes no pudieron girarla para quemar la cerradura. Fue a causa de este imprevisto que forzaron su postura y prendieron fuego accidentalmente porque la llama se extendió a una tela.

Los bomberos del parque de Coruxo apagaron el incendio.

La Policía Científica de la comisaría de Vigo examinó la escena pero cree que no podrá recoger huellas porque el fuego calcinó el lugar. Además, las imágenes de las cámaras de seguridad solo grabaron el brazo metido por la ventana.