El destino

Carlota Corredera CORREDERA

YES

28 mar 2015 . Actualizado a las 05:18 h.

Cada vez que se produce un accidente como el de Germanwings la vida nos recuerda lo frágil que es. Las ciento cincuenta historias que se truncaron contra los Alpes podrían haber sido la de cualquiera de nosotros. Sus destinos podrían haber sido los nuestros. El mismo día de la tragedia, millones de aviones surcaban los cielos del mundo entero pero solo ese Airbus estuvo ocho minutos en caída libre antes de romperse en añicos. Cabría la posibilidad de que la cabina se hubiese quedado sin oxígeno y que los pasajeros y la tripulación se hubiesen desmayado antes de su descenso en picado. Ojalá. Ya de morirte de una manera tan dramática al menos que sea con el menor de los sufrimientos. En días como los del accidente del vuelo 4U9525 Barcelona-Düsseldorf de lo que te entran ganas de verdad es de abrazar a tus seres queridos y decirles lo mucho que les quieres, algo que deberíamos practicar todos los días al margen de lo que nos cuenten los telediarios y las portadas de los periódicos.Cada vez que se produce un accidente como el del pasado martes, junto con las fotos y detalles de las vidas rotas de las víctimas mortales, surgen historias de pasajeros que estaban condenados a perecer en ese avión, pero que el destino les deparaba un cambio de planes a última hora, que les salvó de morir en esas gélidas montañas. Es el destino. Creo firmemente en él. Creo que hay gran parte de lo que nos sucede que depende únicamente de nosotros pero creo también que los grandes acontecimientos, los hitos vitales más importantes están escritos antes de que nos sucedan. Pero hay personas que se resisten a que sus pasos los marque el destino, personas que luchan y ponen todo de su parte para reescribirlo.

Horas antes del terrible accidente de Germanwings, Angelina Jolie anunciaba al mundo que lo había vuelto a hacer. La mujer de Brad Pitt no podrá volver a ser madre porque se ha extirpado voluntariamente los ovarios y las trompas de Falopio. En una carta abierta a The New York Times, Jolie explica que esta drástica decisión se debe a su alta probabilidad de contraer cáncer de ovario. Angelina ya se sometió hace dos años a una doble mastectomía, se extirpó también sus pechos como medida preventiva para evitar un probable cáncer de mama, la enfermedad que acabó con la vida de su madre. «Puedo decirles a mis hijos que no tienen que temer porque me vayan a perder por un cáncer de mama», sentenció entonces. Angelina Jolie, la mujer más poderosa y bella de Hollywood, a punto de cumplir los 40 años, asegura estar preparada para asumir los efectos secundarios de una menopausia precoz. «Espero algunos cambios en mi físico pero estoy tranquila, no es algo que tema». 

Junto con sus grandes ojos y sus carnosos labios, Jolie ha heredado una mutación en el gen BRCA-1 que predispone a desarrollar la maldita enfermedad en ovario y pecho. «No fue fácil volver al quirófano pero celebro la posibilidad que tengo de tomar el control y poder elegir. El conocimiento es poder». 

Jolie ha dado una nueva lección de vida. Con naturalidad y valentía. Es imposible no rendirse ante ella. ¡Brava Angelina!