Él sí que puede hacer ganar a Hillary

Adriana Rey / Corresponsal en Nueva York

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DE TRAJE CHAQUETA Esa es la fórmula de Hillary, que puede llegar a ser la primera mujer presidenta de EE.UU. con un fiel estilo «suit». La demócrata confía en Ralph Lauren y, si llega a la Casa Blanca, podría ser su diseñador de cabecera.

22 oct 2016 . Actualizado a las 05:05 h.

Nada es casualidad en lo que a una campaña presidencial se refiere. Discursos, movimientos, gestos... Todo es analizado y todo cuenta alrededor de cada uno de los candidatos porque todo determina la forma en la que los futuros votantes les perciben y, en este sentido, la imagen de los aspirantes es algo primordial. Bien lo sabe Hillary Clinton, que desde sus comienzos en puestos de liderazgo en Washington, su vestuario ha estado en el punto de mira de los estilistas y editores de moda más importantes del mundo, que trataban de buscar una imagen más efectiva para la ex primera dama.

«La idea de que una mujer tiene que ofrecer una imagen masculina para ser tomada en serio como candidata al poder es francamente para desmayarse. «¿Cómo hemos llegado hasta aquí?», protestó la todopoderosa Anna Wintour. La editora jefe de Vogue USA y declarada demócrata, alzó la voz para despertar conciencias en el 2008, mientras Clinton ocupaba la Secretaría de Estado. Ocho años más tarde y según varias publicaciones, Wintour se ha convertido en la principal aliada de Clinton en cuestiones de moda, contactando con varios diseñadores para vestir a la demócrata.

Eso sí, a pesar de que la cartera sea amplia, solo un diseñador ha despuntado por encima de los demás y, aunque la elección no es todavía oficial, la tendencia no deja lugar a dudas. Se llama Ralph Lauren y su historia habla de humildad, esfuerzo y preparación. Él es perfecto ejemplo del sueño americano, el hombre indicado para vestir a la que podría ser la primera mujer presidenta de Estados Unidos.

«El hecho de que Hillary Clinton haya elegido diseñadores americanos como Ralph Lauren es una estrategia muy inteligente», considera Cristy Marrero, vicepresidenta editorial de Hola! USA. «Es un icono americano y con sus piezas, Clinton siempre se ve elegante, clásica y segura», apunta Nicole Caro, editora de moda y belleza de la revista Siempre Mujer.

LA MODA COMO ESTRATEGIA

Y es que el vestuario del político no solo es importante a nivel estético, también lo es a nivel estratégico. Los mensajes a través de los outfits de la candidata han sido constantes. No hay más que ver la primera fotografía de su Instagram con una imagen de tres trajes sastre en los colores de la bandera: azul, rojo y blanco. Su declaración de intenciones fue contundente cuando pronunció su primer discurso como candidata demócrata, vestida con un traje sastre blanco en alusión al movimiento sufragista de las mujeres americanas y firmado una vez más por el maestro Lauren.

De hecho, repitió en los dos primeros debates presidenciales alternando de nuevo los colores estadounidenses: «Si la señora Clinton llega a la presidencia, la persona que la vista diseñará también el aspecto de la historia», relató con acertada narrativa The New York Times.

En paralelo, son muchos los profesionales que ven el futuro estético de Clinton más allá del traje suit. «Cuando Hillary se ha arriesgado a utilizar estampados y a intercalar colores y accesorios, nos ha demostrado que es capaz de conseguir un gran estilo, sin poner en riesgo su carácter formal», recuerda Sandra Ortiz, fundadora y directora de Latina Cool. «Es elegante. Es posible que el ojo ya se haya entrenado a verla con este look, pero creo que una de las cosas más divertidas de ser mujer es poder jugar con el vestuario», añade desde la experiencia Cristy Marrero, sabiendo que este es el momento para apostar por ello. Y es que a pesar de que Hillary Clinton siempre prefirió potenciar su imagen política por encima de cualquier otra, ahora ya sabe que los códigos de vestuario también forman parte del poder.

SUS «SUITS» MÁS ICÓNICOS

TANNEN MAURY

1. SU GRAN DISCURSO, DE BLANCO SUFRAGISTA. La demócrata confió en Ralph Lauren y lució este «suit» blanco en honor al movimiento sufragista de las americanas. Con este traje, Hillary hizo historia y dio su primer discurso como primera mujer candidata a la presidencia.

JONATHAN ERNST

2. PRIMER CARA A CARA COMO LA MUJER DE ROJO. Clinton vistió un traje sastre en rojo para encarar a Donald Trump en su primer duelo. Las redes sociales no tardaron en bautizarla como «Lady in Red». El rojo también fue elegido por Nancy Reagan en la toma de posesión presidencial de su marido en 1981.

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3. «POWER SUIT» EN EL SEGUNDO ROUND

A diferencia de las dos piezas anteriores de Ralph Lauren, en este caso Clinton eligió colores más sobrios repartidos en un traje azul oscuro con solapa recta blanca y un top claro. El juvenil sastre le permitió moverse con soltura.