Patrocinado porPatrocinado por

Los protagonistas de la sequía en Galicia

Susana Acosta
Susana Acosta REDACCIÓN / LA VOZ

AGRICULTURA

Vítor Mejuto

La escasez de agua ya se sufre en las viviendas del rural, en el sector primario y entre los autónomos

20 nov 2017 . Actualizado a las 18:09 h.

Plácido Varela no dispone de agua corriente en su domicilio de la parroquia de Larín, en Arteixo desde hace algo más de un mes. Su situación es la misma que la de muchos vecinos del rural que se abastecen de pozos particulares y que han visto cómo se han secado: «Teño que carrexar caldeiros de auga entre os veciños, mentres non me autorizan a conexión á rede municipal», comenta Varela que vive en este inmueble desde hace 40 años y asegura que es la primera vez que le ocurre algo así: «Pensei que non me ía a secar, pero secou. Fai un mes mirei o pozo e vin que xa non tiña auga. Os meus veciños engancháronse a rede municipal xa e eu pedino pero aínda estou esperando», asegura.

José Ángel Prieto es ganadero en Vilardevós desde hace algo más de dos años, pero reconoce estar desmoralizado. La sequía le está ahogando. Asegura que tiene problemas desde abril para dar de beber a sus vacas: «Non choveu no inverno e a primavera foi horrible. Aí empezou a secar todo e xa tivemos que traer camións cisterna para cargar a auga en depósitos», afirma al tiempo que reconoce que está dispuesto a tirar la toalla si el año que viene también viene seco: «Como veña outro así, desfágome de todo». Reconoce Prieto que traer el agua con camiones cisterna no es tarea fácil y le ha obligado a dividir las reses en varios grupos: «Tes que ter unha cisterna pequena porque os camións grandes non pasan polas rúas. Unha veciña prestoume unha e cada día cargo una cisterna para un grupo de vacas», explica este hombre que tiene algo sesenta becerras, que beben en estos días entre 5.000 y 6.000 litros de agua al día: «En agosto é máis, chega ata os 8.000», asegura.

MADERA EN EL CORAZÓN. La madera está en el corazón del IES. Es el FP que ofrece, y los profesores se lo toman tan en serio que hasta consiguieron en secadero artificial de tablones. Eso les permite ahorrar costes y pueden usar troncos de roble o castaño, aunque también les gusta, y mucho, el eucalipto.
MADERA EN EL CORAZÓN. La madera está en el corazón del IES. Es el FP que ofrece, y los profesores se lo toman tan en serio que hasta consiguieron en secadero artificial de tablones. Eso les permite ahorrar costes y pueden usar troncos de roble o castaño, aunque también les gusta, y mucho, el eucalipto. JOSE PARDO

Por su parte, Manuel Guerra ha vivido siempre de la venta de maquinaria agrícola. Ya su padre empezó con el negocio. Reconoce que este año está teniendo problemas para vender porque si sus clientes lo están pasando mal, también le afecta en las ventas: «O que non ten rendemento, non merca unha máquina. Teño máquinas de cortar forraxe e este ano non se están vendendo nada porque non hai pasto, tamén teño, entre outra moita maquinaria, nove máquinas de castaña que xa tiña que ter vendido e seguen aquí», asegura este empresario de Viana do Bolo.

Precisamente la producción de castaña de este año se está viendo seriamente afectada por la sequía. Laura San Martiño ha visto reducir su producción en un 80 % por la falta de lluvia: «É máis pequena, de peor calidade e págase a un prezo moi malo, a 1,40 euros o quilo, cando antes ía a 2 euros. Un desastre. Estamos recollendo a castaña en manga corta. Estar esperando todo o ano por estes ingresos e que veña un ano así é moi duro», se lamenta.