Cruz Roja ofrece cada año formación y prácticas en empresas a cien mariñanos

María Cuadrado Fernández
MARÍA CUADRADO BURELA / LA VOZ

A MARIÑA

CRUZ ROJA

Un plan de empleo pensando en la demanda del mercado y con buena inserción laboral

20 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Formación personalizada para alumnos comprometidos. El plan de empleo que Cruz Roja ofrece desde Burela garantiza formación y persigue la inserción laboral de sus alumnos en diferentes sectores. A lo largo del año se imparten diferentes cursos, un servicio que se completa con el de orientación y asesoramiento. El proyecto, en marcha desde el 2013, ofrece cada año formación teórica y práctica a un centenar de mariñanos.

Parte de los alumnos que asistieron al curso de carnicería han encontrado trabajo en negocios de Burela, Foz o San Cibrao, una circunstancia que valoran desde Cruz Roja, que aplauden la receptividad que muestran las empresas dispuestas a colaborar en esta acción que asegura una valoración personalizada. Lorena Rodríguez Rodríguez, técnica de empleo en Cruz Roja Burela, destaca la importancia de que el alumno o alumna esté comprometido y explica que parte del éxito del proyecto radica en que los cursos faciliten la inserción laboral. «Planteamos impartir un curso de jardinería porque veíamos que cada vez había más demanda de personal, también en los Ayuntamientos», explica Rodríguez, quien confirma la colaboración de Cruz Roja con los Concellos de Cervo y Burela. Otro de los cursos, el de empaquetado de pescado, se celebró en colaboración con la empresa focense Pescados Rubén. Para algunos alumnos ha servido de complemento a otros que la entidad impartió de manipulador de alimentos o el de potenciar el trabajo en equipo.

Una de las últimas apuestas ha sido el curso de comercio. Comenzó hace varias semanas y está previsto que a finales de este mes los alumnos puedan iniciar las prácticas. Es un curso que ya se ofreció en años anteriores porque «tiene muy buena acogida». Pendiente de la situación del mercado, la técnica de empleo incide en la importancia de que la formación práctica se complemente con formación teórica: «Lo que las empresas nos resaltan es que les llegan perfiles de candidatos que tienen un buen curriculum, pero que carecen de formación».

Año a año constatan que cada vez se anota más gente para participar en el plan de empleo. La mayoría llegan a Cruz Roja derivados por alumnos que ya han realizado formación en esta entidad, explica Rodríguez, quien asegura que el perfil es variado: «Lo imprescindible es tener 18 años. Tenemos gente joven hasta veterana. Lo que más valoramos es que sean comprometidos. A la hora de seleccionar se tiene en cuenta que la gente que acuda a nosotros pueda estar en una situación cercana a la vulnerabilidad, que sean desempleados de larga duración, que vengan de sectores, como la construcción, que fueron muy castigados durante la crisis…». Los cursos son gratis para los alumnos y, además de parados, hay contratados por horas que muestran su interés por las actividades de Cruz Roja.

Las clases se imparten en un horario que permite conciliar la vida familiar

«Creemos que la respuesta de las empresas es buena. Notamos que al principio, cuando es la primera vez que se las visita para plantearles su participación, algunas muestran ciertas reticencias, pero a nivel general, estamos contentos con su participación», explica Lorena Rodríguez, que destaca el nivel de inserción laboral.

Además de que Cruz Roja exponga este modelo ante las empresas, en algunos casos son las propias firmas las que recurren a la entidad. «Tenemos en cuenta los diferentes sectores y la situación laboral de la zona», explica. Tras conocer este dato, en Cruz Roja sondean a sus potenciales alumnos para conocer qué les puede interesar.

Inscripción

«Aunque los alumnos se pueden anotar a lo largo de todo el año, yo les recomiendo que lo hagan a principios de año; hay más posibilidades para poder elegir», explica. Aunque muchos de los cursos se imparten en la sede de Cruz Roja en Burela, hay otros que se ofrecen en instalaciones de empresas o de otras entidades, principalmente para completar la práctica.

El horario de los cursos también se fija para facilitar la conciliación laboral y familiar: «Normalmente se dan en horario de mañana, ajustándonos a los horarios de los coles». Los cursos de capacitación son de un mínimo de 150 horas, de las que 90 son teóricas y 60 prácticas.