Así funcionará en Cervo la tercera planta gallega para biorresiduos domésticos

María Cuadrado Fernández
MARÍA CUADRADO CERVO / LA VOZ

A MARIÑA

Planta de compostaje que ya funciona en Cerceda
Planta de compostaje que ya funciona en Cerceda Consellería de Medio Ambiente

Los Concellos que se adscriban deben colocar en las calles el quinto contenedor

18 ene 2021 . Actualizado a las 09:32 h.

La nueva planta de compostaje que la Xunta proyecta construir en el polígono de Cuíña, en Cervo, prestará servicio a quince ayuntamientos, a casi todos los de A Mariña y al de Mañón. La planta se asentará en un terreno de unos 8.000 metros cuadrados, de los que 3.500 se dispondrán para la nave cerrada de esta instalación.

Será la tercera planta en Galicia dedicada al tratamiento y gestión de los llamados biorresiduos domésticos, después de la puesta en marcha el año pasado de la de Cerceda, en el propio complejo medioambiental de Sogama, y de anunciar la licitación de la segunda, en Vilanova de Arousa. Está previsto construir otra planta en el sur de Ourense con el fin de poder ofrecer este servicio en todas las provincias. La inversión prevista por la Consellería de Medio Ambiente para la planta mariñana asciende a 5,5 millones y prevé que emplee a entre 8 y 10 personas.

Capacidad

¿Cuántas toneladas tratará? Desde la Xunta indican que podrá tratar hasta 3.000 toneladas al año de fracción orgánica de residuos domésticos y otras 1.600 de podas y restos de madera. El objetivo es conseguir una producción de 1.500 toneladas anuales de compost de alta calidad, que se destinará al sector de la agricultura como abono natural y sostenible en relevo de los fertilizantes artificiales.

Gestión ciudadana

¿En qué contenedores deberán los ciudadanos depositar estos residuos? Desde la consellería aseguran que los Concellos que se adscriban a esta planta deberán implantar previamente en sus calles la recogida selectiva del denominado quinto contenedor, de color marrón (una obligación establecida por la propia Unión Europea), concebido «para acoller os residuos orgánicos xerados nos fogares».

 

 Los procesos

¿Cómo funcionará la planta? Abarcará todo el proceso del compostaje de los residuos: pretratamiento, fermentación, maduración y almacenamiento, así como los correspondientes tratamientos de aire y de aguas. El tratamiento se llevará a cabo en naves cerradas, haciendo uso en todo momento de las últimas tecnologías de procesado, control de olores y ruido, y la operativa industrial de la instalación se alimentará con energía renovable (a través de paneles solares, fundamentalmente).

Podas

Además de biorresiduos domésticos, ¿qué otro tipo de residuos verdes se tratarán podas de jardines o también restos forestales? «Fundamentalmente restos de podas procedentes de vivendas particulares», matizan desde la Xunta.

Abono

¿Cómo podrán después los agricultores de la zona aprovechar como abono el compost tras el tratamiento de estos biorresiduos? «Deseñarase no seu momento o protocolo a seguir. O obxectivo é obter un compost de alta calidade que cumpra cos requisitos establecidos pola normativa vixente e que poida ser utilizado con absolutas garantías e sen restricións, na agricultura e na xardinería, en substitución dos fertilizantes artificiais», explican.

Tramitación

¿Cuáles son los trámites del procedimiento administrativo hasta la puesta en marcha de la planta? El 28 de diciembre se presentó cómo será la futura planta por parte de la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, y se licitó la elaboración del proyecto básico. Sobre el mismo pivotará el pliego del concurso que regirá la construcción de la instalación, dotación de tecnología... Culminada la obra y habilitados los procesos técnicos, la planta entraría en un período de pruebas para después comenzar a andar. «Sogama réxese pola Lei de Contratos do Sector Público, polo que o procedemento axustarase aos prazos e esixencias que marca a normativa», puntualizan desde la consellería.