A Pontenova muestra el mundo de la artesanía y las antigüedades

José Francisco Alonso Quelle
josé alonso A PONTENOVA / LA VOZ

A PONTENOVA

CEDIDA

Tras el paro por la pandemia vuelve la feria con récord de expositores, 65

04 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras el parón obligado el año pasado por la pandemia, vuelve una cita imprescindible del puente festivo de diciembre, la Feira de Artesanía e Antigüidades de A Pontenova, que alcanza ya su décimo cuarta edición. El evento está marcado en el calendario de centenares de personas que acuden a la villa pontenovesa, que estos días presenta una de las mejores imágenes del año, llena de gente. Detrás de la feria hay un nombre propio, Francisco Martínez, teniente de alcalde pontenovés y anticuario, artesano y carpintero de profesión, cabeza visible de la organización año tras año. «Esta vez seremos algo máis de sesenta expositores, 65 ou 66. Podémolo facer porque aumentamos un pouco o espazo expositivo, pero con todo, queda xente fora, en lista de espera», señala. 30 son anticuarios, en una carpa instalada en la plaza de Os Fornos, y el resto artesanos, que se ubican en la Casa da Cultura.

Son muchos los anticuarios, la mayoría, que repiten año tras año, porque A Pontenova se ha consolidado para ellos como una buena plaza para las ventas. Llegan a la villa procedentes de Alicante, Huesca, Madrid, País Vasco, Asturias, Portugal, Francia... Los artesanos son, en su mayor parte, de Galicia y Asturias.

Entrada gratuita

La feria abre hoy sus puertas, a las 11.00 horas, y lo hará también el domingo y el lunes hasta las 14.00 y de 16.00 a 21.00 horas. La inauguración oficial será esta tarde, a las siete y media de la tarde. Como siempre, la entrada será gratis, en contra de lo que ocurre en la mayoría de ferias similares que se organizan.

La feria pontenovesa tiene un público fiel, que acude año tras año. El mercado de las antigüedades y la artesanía es así, y más allá de los curiosos, de los que aprovechan el evento para disfrutar de un ameno día en A Pontenova, están los que acuden puntualmente para ver las novedades y los artículos que presentan cada año sus anticuarios de referencia. Hay un amplio mercado para los coleccionistas, que en A Pontenova encuentran de todo, artículos con gran variedad de precios, desde sellos y monedas a muebles. Prácticamente, de todo.

La feria tiene un coste: unos 25.000 euros de presupuesto, que según explica Francisco Martínez se cubren con la aportación del Concello, 18.000 euros, y de la Deputación de Lugo, unos 6.000. El gasto está plenamente justificado por el movimiento que registra A Pontenova estos días «e porque soa, que tamén é moi importante».

Porque el comercio local y singularmente la hostelería, que estos días ofrece menús especiales por la feria, se beneficia de la gran afluencia de público, que algún año, en ferias de cuatro días, llegó a rondar las 6.000 personas, según las estimaciones de la organización.

Para Francisco Martínez, que año tras está al pie del cañón, como organizador y participante en la feria, contactar con los anticuarios resulta más sencillo: «Ningún quere deixar o posto. Iso é porque se vende, porque se imos a unha feira e non vendemos podes probar unha vez máis, pero se se repiten as vendas baixas xa non volves». Reconoce que en el caso de los artesanos las complicaciones son mayores, porque en la feria siempre tratan de ofrece variedad, mostrar los diversos oficios que se practican, para que el público se lleve una mejor impresión.

Concentración de vespas, motos y vehículos clásicos y una espectacular exposición de olería lucense

Estos días en A Pontenova paralelamente a la feria habrá una concentración de vespas, motos y coches clásicos, con inscripción a las 11.00 horas en la plaza de Os Fornos (15 euros por vehículo con vales de descuento de cinco euros). Habrá trofeos para el vehículo más antiguo, el mejor conservado, el llegado desde más lejos y el más veterano. Hoy la jornada se dedica a las vespas y las motos y mañana a los coches clásicos.

Otro aliciente para visitar la feria y A Pontenova será una exposición de olería lucense, con un centenar de piezas cedidas para la ocasión por un particular (que prefiere mantenerse en el anonimato), representando la olería de Mondoñedo, Gundivós y A Terra Chá.

Y, por supuesto, no faltará una pulpería. De Monterroso.