Vecinos de Masma, en Mondoñedo, patrullan de noche vigilando sus fabas por la escasez de guardias civiles

José Francisco Alonso Quelle
J. ALONSO MONDOÑEDO / LA VOZ

MONDOÑEDO

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De los siete agentes destinados en Mondoñedo, solo tres están en servicio. A una alerta por robo tuvieron que acudir guardias de Ribadeo; tardaron 40 minutos

18 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Ante la escasez de guardias civiles, vecinos de Masma, en Mondoñedo, patrullan por su cuenta para tratar de amedrentar a los ladrones que se quieren hacer con las cosechas de fabas. Es el caso de Susana Fernández, quien ayuda a su hija, propietaria de la plantación: «De día traballamos e de noite facemos garda», señala.

Este tipo de robos no son habituales, según apuntan productores de Lourenzá que cultivan su denominación geográfica protegida de faba. Pero los hay. Susana Fernández descubrió hace unos días que habían sido víctima de uno de ellos: «Levaron o que había en dous ferrados. Dende fai quince días, de noite, cando podemos, facemos gardas co coche. Hai unha furgoneta branca sospeitosa, que cando nos ve vaise. Temos outro veciño, xubilado, que ten máis tempo e fai garda todas as noites», explica.

El problema se ha agravado por la escasez de guardias civiles en el cuartel de Mondoñedo, que atiende también al concello de Lourenzá. En Mondoñedo hay siete agentes en plantilla, pero solo tres están en servicio, uno de ellos en prácticas. El resto no trabajan por diferentes causas. Al parecer hay cursadas varias solicitudes de cambio de destino.

Es un problema, la escasez de guardias civiles, que se da en muchas zonas rurales de Galicia. Las consecuencias las sufrió Susana Fernández el sábado pasado, cuando fue víctima de un intento de robo. Alguien entró en su invernadero. Al oír ruidos, su hijo de 17 años se asomó a la ventana iluminando con un foco. Los ladrones, al verse sorprendidos, huyeron dejando el arado romano que trataban de robar. Susana Fernández llamó al 062 para dar la alarma, pero los agentes tardaron 40 minutos en llegar: «Eles non poden facer nada máis», sostiene, comprensiva, la víctima, ya que los guardias se desplazaron desde Ribadeo, a unos 30 kilómetros de distancia.

«A Garda Civil non vai estar a todas horas pendente e non pode evitar todos os roubos, pero está claro que cantos menos gardas haxa, moito pior», añade.

Desde el Concello de Mondoñedo, la alcaldesa, Elena Candia, se sumó a la petición de más personal para el cuartel: «Atende dous concellos e é inexplicable que tantas baixas como hai neste momento non se cubran».

Por su parte, la subdelegada del Gobierno en Lugo, Isabel Rodríguez, reconoció las bajas en Mondoñedo, pero garantizó que la atención ciudadana está cubierta por guardias que puntualmente y de ser preciso se desplazan desde otros cuarteles: «Os medios e recursos son os que son. Os recortes non os fixo este goberno», concluyó.