Moncho Fernández califica de horrible la defensa tras el descanso

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

ANDAR MIUDIÑO

SANDRA ALONSO

Subraya que las acciones de uno contra uno fueron determinantes

21 abr 2019 . Actualizado a las 01:30 h.

La cara de Moncho Fernández a la conclusión de la contienda era más expresiva que cualquier discurso. En todo caso, compareció en rueda de prensa con la capacidad de análisis de siempre y dejó una reflexión que va más allá del partido ante el Fuenlabrada: «Parece que cuando no somos capaces de anotar con tanta fluidez perdemos algo de carácter en el aspecto defensivo y eso es algo que tenemos que mejorar de aquí al final».

El Alquimista de Pontepedriña vio dos mitades claramente diferenciadas. «No queríamos que Fuenlabrada hiciese su juego, que corriese a toda pista con esas llegadas en transición -comentó-. Queríamos pararles uno contra uno y creo que fue algo que conseguimos en la primera parte. Contestamos bien los unos contra uno, fuimos capaces de correr mucho, anotar y alcanzar una gran ventaja que yo creo que se estropeó un poco en los dos últimos minutos del segundo cuarto, donde por pérdidas tanto en un saque de fondo como en el rebote nos cuestan dos triples y la distancia se recorta a catorce puntos».

Y ahí hubo un punto de inflexión que achaca, en gran medida, a la «defensa». El Fuenlabrada, que llegó al minuto 18 con solo 29 puntos en su casillero, acabó el tiempo reglamentario, antes de la prórroga, con 88. No puso paños calientes: «Nuestro problema grande ha sido la defensa de la transición. Sobre todo, nos ha costado muchísimos puntos por errar en ese apartado tan importante. La defensa uno contra uno ha sido horrible tanto en el tercer y último cuarto como en la prórroga. Encajamos 16 puntos en cinco minutos, prácticamente anotaron en cada canasta. Pese a todo esto, el partido entró al final en un cara o cruz y en este caso nos ha salido cruz. Nunca mejor dicho, porque tanto Cruz como Rowland y Bellas nos han matado en cada uno contra uno. Ese ha sido nuestro gran problema, el balance defensivo y el uno contra uno. Defensivamente hemos estado horribles en estos últimos 25 minutos, horribles, horribles».

Los detalles

Si bien en la retina de un partido muy igualado suelen quedar detalles del tramo final, Moncho Fernández insistió en que igualmente fueron determinantes otros segmentos. Entre ellos, el arranque del tercer cuarto: «Nuestro balance defensivo son tres bandejas que los ponen a ocho puntos. Sabíamos que dependíamos de esto y no fuimos capaces de pararlos».