Este viernes, la agrupación deportiva cumple tres décadas; el salto a la élite llegaría un par de años después
11 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La Agrupación Deportiva Cortegada nació el 15 de septiembre de 1987. Así reza en la página web del club vilagarciano, que pegó el salto a la élite del baloncesto nacional un par de temporadas más tarde. Sucedió durante el verano de 1990. Un verano muy especial para el baloncesto de Vilagarcía porque también fue en ese momento cuando el BBC decidió crear un conjunto de categoría sénior para dar salida a los chavales que ya despuntaban en la cantera.
Lo del Cortegada fue más brusco. Era el Liceo quien lucía la bandera del baloncesto femenino vilagarciano con un equipo en Segunda División que, ya con el respaldo de Miguel Ares e Inelga, intentaba dar el salto a la Primera B. Y surgió la oportunidad. Una oportunidad en la que el principal problema era el riesgo económico y que hizo que el Liceo se echara a un lado. Apareció entonces la opción de Carril y allí se mudaron Paco Sáez, que era el entrenador liceísta, y buena parte de las jugadoras. Siña Abeijón, Betty Senra, Belén Junquera, Mabel Suárez, Rosa Vázquez, Susana Somme, Mercedes Iglesias, Pili Lado, Naty Rey, Gelines Vidal, Lourdes Mallón y Beatriz Rey formaban aquel primer histórico plantel que colocó a Vilagarcía en el segundo peldaño del baloncesto femenino estatal por primera vez. Fue un inicio complicado. No había en el pabellón de Carril unas canastas reglamentarias o un marcador y el Inelga Cortegada no pudo jugar ni un amistoso ante su afición.
Pero el proyecto cuajó. Y en la campaña 1994-95 llegó la primera clasificación para disputar una fase de ascenso. Y la temporada siguiente, en Burgos, el primer ascenso a la máxima categoría. El esfuerzo económico ya era muy importante y Miguel Ares se hizo a un lado para que fuera Mejillón de Galicia quien patrocinara al club. Vilagarcía estaba orgullosa de su equipo y quien más quien menos conocía las andanzas de Tury, la hija de cuatro años de Tera Sheriff, la primera estadounidense en la historia de la entidad. No hubo suerte en la temporada del debut en la élite, pero sí momentos para el recuerdo, como el partido contra un Pool Getafe que tenía al mítico Díaz Miguel como entrenador.
Descendió el Cortegada pero al año siguiente, también con Miguel Ángel Ortega en el banquillo, ascendió de nuevo en la fase de ascenso que se celebró en Vilagarcía. Una fase con un último partido agónico que Siña jugó con una rotura de fibras y que se resolvió en el último instante.
Llegaron luego los años de oro, con hasta tres participaciones en la fase final de la Copa de la Reina, la clasificación para el play off por el título y partidos de la Eurocup que llenaban Fontecarmoa los jueves. Con Extrugasa como patrocinador principal. Luego, tras algunos excesos económicos, otro descenso y de nuevo el éxtasis con la fase de ascenso de Vilagarcía, que también tuvo algún susto. Faltaba todavía un último descenso y las apreturas económicas como último capítulo, antes de cumplir los treinta años en lo que parece un magnífico estado de salud. Soñando incluso con otro salto para celebrar el cumpleaños. En León, hace unos meses, ya estuvo cerca.