O Salnés se ilumina para encender el espíritu navideño

a. garrido / b. costa VILAGARCÍA / LA VOZ

CAMBADOS

monica irago

La víspera del puente fue la fecha escogida por varios concellos para pulsar el botón del alumbrado para los festejos

06 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Allí estaban: Papá Noel, el alcalde de Vilagarcía y el animador del evento, cantando la cuenta atrás para apretar el botón rojo que arrancara el alumbrado navideño de Vilagarcía. Ya hace unos años que ese protocolo de dar el pistoletazo de salida a la Navidad, que ahora se adelanta con el Black Friday, se ha convertido en una parte más del espectáculo. Ayer estuvo algo más deslucido por la lluvia, porque ya se sabe que puestos a escoger para sacar el paraguas a la calle mola más el día de la cabalgata que tal jornada como ayer. Un paraguas convenientemente utilizado es un excelente receptáculo para rapiñar caramelos, y ayer había que hacer cola para que Papa Noel, o alguno de sus ayudantes, te los diera.

En Vilagarcía, el Concello organizó una minifiesta que ni siquiera la lluvia pudo aguar. Es verdad que tuvo una menor afluencia que otros años, pero hubo tiempo hasta para que el alcalde se hiciera algún selfi con la gente que estaba a pie de palco.

No hay árbol en esta ocasión en la plaza de Galicia, pero sí un paquete de regalo enorme, de nada menos que diez metros del alto, a través del cual, además, se puede transitar. Un escenario ideal para las fotografías y, de hecho, ayer fueron ya varios centenares las que se tomaron en el lugar.

El alumbrado llegará a muchos puntos de la ciudad: en Fexdega habrá unos arcos de 2,40 metros de alto, en Carril y Vilaxoán los adornos llegarán a las plazas y en todas las casas de cultura se colocará un trineo de Papá Noel que, por otro lado, se paseó por el pueblo antes de dirigirse a la plaza de Galicia para apretar el botó rojo.

Cambados

Más comedido fue el acto de encendido en Cambados. En un año en el que los adornos navideños se extenderán a nuevas zonas de la localidad ,otro punto interesante en la villa es que regresará la ludoteca, que se celebra en el Salón Peña. Trece mil euros es el presupuesto que se ha destinado para estos menesteres.

En Vilanova también encienden su Navidad. Además del castillo de la aldea infantil del jardín Umbrío se estrenó un tren de luces, que fue la sorpresa que se anunciaba para ayer. A mayores, hay un cono de luces en la plaza de O Castro y demás adornos repartidos por el pueblo y las parroquias. En total, se gastan unos 14.000 horas para esta partida. La chocolatada con churros, que hubo de ser traslada al pabellón multiusos por la lluvia, caldeó el ambiente en una jornada muy especial para niños y mayores.