Investigan a los responsables de un almacén clandestino de productos peligrosos en Catoira

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido CATOIRA / LA VOZ

CATOIRA

martina miser

Las instalaciones, que albergaban seis toneladas de residuos tóxicos, sufrieron un incendio el año pasado

15 jun 2021 . Actualizado a las 20:54 h.

Todo tuvo lugar hace poco más de un año, en abril del 2020. Fue entonces cuando un incendio que surgió en un galpón cercano a una nave disparó las alarmas en Catoira. Lógico, porque la instalación estaba alquilada por una empresa de ámbito nacional especializada en fumigaciones y control de plagas industriales. Ahora, poco más de un año después, la Guarda Civil investiga penalmente a los responsables de la nave empresarial. El encargado de la empresa están en la diana por un presunto delito de riesgo y otro contra los recursos naturales y el medio ambiente. «Además, también se investigó por un delito de falsedad documental al responsable de la empresa que gestionaba la recogida de residuos», apuntan fuentes policiales.

La preocupación se incrementó cuando los servicios de extinción detectaron que se producía una reacción violenta del material inflamado con el agua utilizada para el control del fuego. Y fue entonces cuando comprobaron que en el interior de las instalaciones que, asegura la Guardia Civil «carecían de carteles, señales o pictogramas que indicasen la actividad que se desarrollaba en la finca, en realidad constituía el almacén de una empresa relacionada con el sector de productos y tratamientos biocidas en salud pública, fitosanitarios postcosecha y control de almacenamientos de productos agroalimentarios, así como el control de plagas».

La investigación que realizó la Guardia Civil valió para averiguar no solo las circunstancias del incendio, sino también la gestión de los residuos y los productos sensibles que manipulaba la empresa.

La investigación concluyó con unas conclusiones tremendas, que atribuyen al encargado y dos empleados un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente por tener una explotación «en la que se estaba almacenando una tonelada de productos químicos fumigantes, muy tóxicos, sin haber obtenido la consolidación del proyecto adjuntado a la declaración responsable ni la inscripción en el ROPO (Rexistro Oficial de Produtores e Operadores de medios de defensa fitosanitarios)».

Además, se les imputa un delito de riesgo provocado por explosivos y otros agentes «por el almacenamiento clandestino en cantidad estimada de seis toneladas de residuos agroquímicos, con principio activo de toxicidad aguda (...) que puso en peligro al personal que participó en las tareas de extinción», apunta la Guardia Civil, que señala que también se investigo al administrador de la empresa gestora por un delito de falsedad documental.