Las restricciones por el COVID-19 ponen fin a seis años consecutivos de reducción del paro en Arousa

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MARTINA MISER

Por primera vez desde el 2013, cumbre de la última gran crisis económica en España, la comarca arroja un marzo peor que el anterior

04 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando un Estado llega a la necesidad de confinar a todo ciudadano ajeno a los sectores productivos esenciales en este momento para detener el avance de una pandemia que hoy se cobra ya miles de víctimas mortales, la caída del empleo se da por descontada. Con cientos de ERTEs aprobados o en tramitación, el coronavirus COVID-19 ha impactado también con fuerza en los datos del paro registrado el mes pasado, que esta semana se hacían públicos. Unos datos que informan de 454 nuevos trabajadores sin ocupación en los once municipios de O Salnés y Baixo Ulla, que a 31 de marzo sumaban 8.551 parados, frente a los 8.097 con los que despedían febrero. Esto es, un 5,6 % más. Ningún concello se libró de sufrir el incremento, con Valga a la cabeza a nivel porcentual, un 8,2 % de subida (29 personas más), y Vilagarcía, en lógica por su mayor tamaño, a nivel de número de afectados, 158 (+4,8 %).

Pendientes de que el discurrir de la guerra contra el COVID-19 aclare si estamos ante un breve alto en el camino, o frente al inicio de una nueva profunda depresión económica y laboral cuando todavía empezamos a salir de la anterior, lo cierto es que el último dato de desempleo supone el punto final a seis años consecutivos de mejora en las cifras de paro registrado en la banda sur de la ría de Arousa en la comparativa interanual entre cada mes de marzo. Concretamente, desde que en el 2013 se alcanzase en la comarca el mayor número de personas con intención de trabajar, pero sin encontrar donde poder hacerlo.

Aquel marzo del 2013 Arousa padecía la asfixiante realidad que dibujan 14.503 desempleados, más del 10 % de su población total, menores de 16 años sin derecho a trabajar incluidos. Seis años después, en marzo del 2019 los registros de la Consellería de Emprego hablaban de 8.305 arousanos en busca de un trabajo. En un sexenio, tras sucesivas caidas internanuales, el paro registrado se había reducido en la comarca un 42,74 %. En marzo del 2020, los 8.551 desempleados de los municipios de la zona suponen 246 más que los contabilizados doce meses atrás, un incremento del 2,96 %.

Que la paralización generalizada de la economía por la pandemia, y no otros factores, está detrás de ello queda patente cuando comparamos las cifras de febrero del 2019 y del 2020. El dato interanual del mes inmediatamente anterior al decreto del estado de alarma por el COVID-19 informa de 466 parados menos, con una caída del 5,46 % desde los 8.563 de febrero del 2019 a los 8.097 de este.

Dando por hecho que abril será aún peor que marzo en materia de empleo, es bueno recordar que el grueso de los trabajadores afectados por ERTEs estarán blindados los 6 meses posteriores al levantamiento del estado de alarma.