Horreum: La apuesta de un emprendedor para hacer de viejos contenedores de mercancías albergues para peregrinos
VILAGARCÍA DE AROUSA
Caldas será la primera localidad en disponer de estos establecimientos
27 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.«Por mi trabajo, recorrí todo el mundo durante trece años. Y tengo claro que no hay ningún sitio más bonito que Caldas». No hay duda, tras una declaración semejante, que David Camba es una de esas afortunadas personas que adoran el lugar en el que nacieron. «A mí me encantan mi pueblo, y me gustaría hacer algo por él», explica este emprendedor, en cuyo ordenador se esconden un sinfín de proyectos sorprendentes. Uno de ellos es Horreum, ganador de uno de los premios Ría de Arousa con los que el Puerto de Vilagarcía y la Asociación de Jóvenes Empresarios premian proyectos con futuro. Horreum, el proyecto de Camba, es una iniciativa que persigue convertir viejos contenedores de transporte marítimo, desahuciados ya para los largos viajes oceánicos, en albergues en los que los peregrinos puedan descansar cómodamente tras una larga jornada en el Camino.
El primero de esos contenedores-albergue se instalará en Caldas. Al menos, esas son las cuentas que echa David, que ya ha entablado las correspondientes negociaciones con el Concello. La idea, asegura, ha sido muy bien recibida por el alcalde de una localidad que ha encontrado en el Camino un vector de crecimiento. Para lo bueno —el carácter dinamizador de las economías de las rutas jacobeas es evidente— y también para lo malo. «En Caldas los alquileres se han disparado porque muchas viviendas se están destinando a acoger peregrinos, funcionan como albergues, y eso acaba repercutiendo en la gente que está buscando un piso para vivir», explica nuestro emprendedor. Esa realidad fue uno de los elementos que lo impulsaron a formular Horreum, que trata, básicamente, de construir albergues que se podrán instalar «en cualquier punto del Camino», allí donde la demanda lo reclame.
Que sean móviles no significa, explica este emprendedor caldense, que no dispongan de todas las comodidades: todo lo contrario. La intención es hacer de ellos unas instalaciones cálidas, acogedoras, dotadas de todos los servicios y con accesibilidad universal, ya que la intención es que todo el mundo pueda utilizarlos —para ello se evitarán los desniveles y se harán puertas de un ancho suficiente para el paso de sillas de ruedas—. Todo ello, «utilizando como base contenedores marítimos fuera de uso», que se rehabilitarán y formarán « un conjunto compuesto por alojamiento, aseos y zonas comunes, acondicionados para personas de movilidad reducida». Al ser un sistema modular, se puede adaptar a las necesidades de cada punto en el que se quieran instalar.
Los contenedores serán sometidos a un importante cambio estético con el que se pretende homenajear «algo tan emblemático de nuestra tierra como son los hórreos». Para lograrlo, «utilizamos materiales autóctonos que se integran con el paisaje sin dejar de lado un diseño moderno y atemporal, con unos acabados de primera para ofrecer la mejor experiencia a nuestros clientes», explica Camba. Según relata, «gracias a la versatilidad de nuestros albergues podemos instalar hórreos en los puntos mas interesantes del Camino: orientados a disfrutar de nuestros preciosos paisajes, entre dos etapas para las personas que no puedan recorrer grandes distancias, donde exista mas carencia de alojamientos…».
Su intención es que el primer hórreo-albergue pueda estar funcionando en Caldas en cuestión de meses, a fin de aprovechar el tirón, que augura excelente, del año Xacobeo 2022.