Los negocios, confusos ante la implantación de las medidas de ahorro
VILAGARCÍA DE AROUSA
Comerciantes de Vilagarcía desconocen la dimensión en que les influyen las decisiones tomadas por el Gobierno
11 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Ayer entraron en vigor las medidas establecidas por el Gobierno dentro del plan de eficiencia y ahorro energético, dirigidas a todos los centros públicos y privados que presten servicios públicos. Entre las decisiones tomadas están: la limitación de la temperatura interior a un mínimo de 27 grados en verano y un máximo de 19 en invierno; el apagado de las luces de los escaparates a partir de las diez de la noche; y el establecimiento de un sistema de cierre que evite fugas de calor y frío. De la primera medida están exentos aquellos locales cuya actividad exija mantener una temperatura interior diferente a la establecida y tengan justificación de ello. Con esta incitativa, el Gobierno prevé una reducción del consumo energético de entre el 4 % y el 5 %.
En Vilagarcía, varios comercios han empezado a implantar las medidas impuestas dentro de lo posible, pues muchos de ellos no cuentan con sistemas de aire acondicionado o calefacción, ni con los cierres de puertas que se demandan. Esta última es la norma más polémica debido a la inversión económica que supone. En cuanto a la regulación de la temperatura, aquellos negocios que no tienen los dispositivos mencionados, no saben muy bien si deben hacer algo al respecto, y ante la falta de información por parte de las Administraciones, pues la mayoría se han enterado gracias a la prensa o sus superiores, no se consideran realmente afectados por los preceptos impuestos.
Por otro lado, aquellos a quienes la normativa les afecta de manera distinta, también sienten que están en un limbo de desinformación. Algunos afortunados, como es el caso de las farmacias, han recibido especificaciones por parte del Colegio de Farmacéuticos de Pontevedra. Así lo han explicado en la farmacia María Pilar Rodríguez Martínez de Vilagarcía: en su caso, desempeñan una actividad que se regula por una normativa específica, por lo que no se ven afectados de la misma manera que los demás. Muchos medicamentos deben conservarse a 25 grados de temperatura, por lo que la norma de los 27 ya no la pueden cumplir; además, las farmacias de guardia no se verán afectadas por el apagado de las luces, pues deben mantener estas encendidas para notificar que están en funcionamiento.
Muchos no tienen claro hasta que punto las medidas impuestas serán de verdad efectivas, lo que produce un cierto malestar, agravado por los gastos económicos añadidos. Además, varios afirman que las normas de ventilación impuestas durante la pandemia ya ayudaron a reducir notablemente el consumo energético, destacando que no implicaron el gasto de estas nuevas y que ven innecesario teniendo en cuenta la inflación: «A mí las medidas energéticas me están suponiendo más gasto», declara una comerciante del municipio.
Ana Fernández: «O das portas é un gasto práctico»
Ana trabaja en la tienda Metrópolis Cómics, en Vilagarcía. Como muchos, desde ayer ha empezado a aplicar las medidas impuestas, como la regulación de la temperatura y el apagado de las luces, que admite que cree que tardará en acostumbrarse debido a que antes las luces de los escaparates quedaban siempre encendidas. Al igual que otros negocios, van a tener que instalar un brazo en la puerta de entrada y, pese al coste que implica, ella piensa que «é un gasto práctico, pois era algo que realmente necesitabamos». Por su parte, admite que está totalmente de acuerdo con que se establezcan medidas para el ahorro energético, pero no está segura de si las decisiones tomadas serán las más efectivas: «Haberá que velo», declara.
Isabel Fernández: «Las medidas no nos afectan nada»
Isabel Fernández, dueña de la tienda de souvenirs y objetos de regalo Alambiques, en Vilagarcía, al igual que la mayoría, se enteró por la prensa de la nueva normativa y tanto ella como su marido, con quien administra el local, no tienen del todo claro qué deben hacer al respecto. Ambos no se sienten realmente afectados por las medidas impuestas: «No tenemos ni aire acondicionado ni calefacción, entonces no nos afectan nada», afirma ella. Tampoco saben si deben implantar el mecanismo de cierre específico para evitar las fugas. Por el momento, respetarán la normativa dentro de lo que ellos creen posible, como es el apagado de las luces a las diez de la noche, que en su caso será a las nueve, por ser la hora de cierre del negocio, a excepción de fechas festivas.
Paula Pazos: «Estamos todos ahí un poco perdidos»
Paula Pazos, propietaria de la tienda de golosinas Te Endulzo, de Vilagarcía, aún no ha aplicado todas las medidas en su negocio, debido a la incertidumbre: «Estamos todos ahí un poco perdidos», admite. Por fortuna, la tienda ya cuenta con una cortina de aire para evitar las fugas de calor y frio, y tiene el apagado de luces establecido para las diez de la noche de forma automática desde siempre. No obstante, no tiene claro qué debe hacer con la temperatura del local, pues por lo general ella suele mantenerla sobre los 24 grados y no tiene claro si subirla hasta los 27 va a perjudicar a algunos de sus productos: «A ver si los chocolates no se me ponen malos». Por el momento, siente todo un poco en el aire, pero acudirá a su gestoría para informarse como es debido.