Una fianza de 80.000 euros permitirá al supuesto cabecilla de la red desmantelada en Arousa eludir la prisión

La Voz VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Martina Miser

La policía atribuye a la organización dos alijos con un volumen conjunto de cinco toneladas de hachís que fueron decomisados hace meses en Huelva

25 nov 2022 . Actualizado a las 23:32 h.

La operación que el Grupo de Respuesta Especial para el Crimen Organizado (GRECO) del Cuerpo Nacional de Policía ejecutó el lunes en Arousa se consumó con la detención de 21 individuos, un número que el ministro Grande Marlaska, de visita en Pontevedra, acaba de elevar esta mañana a 27. En cualquier caso, once de ellos fueron trasladados ayer al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Vilagarcía, que asume la dirección de las investigaciones. El resto fueron puestos en libertad previamente, en las propias sedes policiales a las que habían sido conducidos. Por fin, la titular de la sala arousana decretó prisión provisional para cinco de los investigados a lo largo de una maratoniana jornada de declaraciones. Los cargos que pesan sobre ellos apuntan al tráfico de sustancias estupefacientes y a una serie de condiciones que agravan este delito. Entre quienes abandonaron la capital arousana con destino a la cárcel de A Lama se encuentra el presunto cabecilla de una red de narcotráfico a la que se atribuye presencia en ambas orillas de la ría, conexiones con Marruecos, Portugal y los clanes del Estrecho, y capacidad para mover hachís por toneladas. Se trata de Ramón Dorgambide, un viejo conocido de las fuerzas de seguridad que en su momento ejerció como lugarteniente de David Pérez Lago. Curiosamente, él es el único de los cinco que podrá eludir la estancia en el calabozo previo pago de una fianza de ochenta mil euros.

La tesis policial apunta a que la organización arousana está detrás de dos alijos de hachís, con un volumen conjunto que roza las cinco toneladas, que fueron decomisados en el entorno del Estrecho hace alrededor de un año. La clave del procedimiento judicial que ahora se inicia estribará, por lo tanto, en determinar las conexiones que unirían al grupo que presuntamente comandaba Dorgambide con dichas aprehensiones. Las conclusiones de la investigación desarrollada por el GRECO contienen otro punto llamativo: la posible utilización de embarcaciones de pesca para la recogida de la mercancía en el sur y su traslado por mar a Galicia. Un método clásico que las fuerzas de seguridad no detectaban desde hace mucho tiempo, pues la fórmula más habitual consiste ahora en el desembarco de la droga en las costas andaluzas para su traslado por carretera hasta el norte, con Portugal como una de las vías de acceso más recurrentes.

En su balance, la Policía Nacional explica que fue en septiembre del 2021 cuando tuvo conocimiento de que una organización estaba introduciendo en España importantes cantidades de hachís a través de pesqueros y embarcaciones de alta velocidad. Los agentes localizaron un camión sospechoso en un astillero de Portugal. El vehículo cargaba una planeadora de doce metros y medio de eslora y tres motores de potente cilindrada, con la que horas después accedió a una nave vinculada al grupo que estaba siendo investigado.

La vigilancia de la embarcación desveló que poco después salió a navegar con rumbo sur. Su singladura concluyó con la intervención de 89 fardos de hachís con un peso aproximado de 2.600 kilogramos, que fueron arrojados al mar en Huelva. Algo que no evitó que sus tripulantes fuesen detenidos.

Aquello ocurría en noviembre del 2021. Tres meses más tarde, ya en enero de este año, la Guardia Civil intervino, también en Huelva, otra lancha rápida, en aquella ocasión con catorce metros de eslora y tres motores de trescientos caballos. A bordo, un alijo de volumen semejante: 2,1 toneladas. Los dos tripulantes, procedentes de A Illa, habían sido contratados por una organización marroquí.

Los miembros del GRECO explican que el grupo disponía de un pesquero con base en A Illa de Arousa, que fue reparado para actuar en el mismo negocio. Los propietarios del hachís que iba a transportar contactaron con el representante de la organización gallega para proporcionar los puntos de encuentro de una tercera operación y entregar los medios técnicos necesarios para llevarla a cabo. Aunque el barco tomó rumbo sur el 18 de mayo pasado, el patrón decidió abortar el porte y abandonar la embarcación en una playa de la localidad onubense de Punta Umbría. Los agentes no esperaron más. De acuerdo con la autoridad judicial y la Fiscalía Especial Antidroga de Pontevedra, cayeron sobre los integrantes de la red. El número total de detenciones, tal y como este jueves señaló el ministro Grande Marlaska, a lo largo de su visita a Pontevedra, ascendió a 27 en Vilagarcía, Vilanova, A Illa, Sanxenxo y Catoira, además de un municipio de la provincia de Vizcaya.