La obra del río Breiro incluye una restauración paisajística de una extensión superior al Camp Nou

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro BOIRO / LA VOZ

BARBANZA

CEDIDA

El proyecto prevé hacer un lago y plantar 200 árboles de ribera

10 ago 2017 . Actualizado a las 22:06 h.

Las máquinas llevan casi un mes de trabajo en el entorno del río Breiro, donde está proyectada la actuación que espera poner fin a la contaminación por amianto y fecales. El nuevo colector dará servicio a cerca de 9.000 habitantes, es decir, a cerca del 50 % de la población del municipio, al tiempo que la instalación conllevará una restauración paisajística del entorno de una superficie superior al Camp Nou.

De los más de dos millones que se destinarán a la actuación que completará el plan de saneamiento de la Xunta en Boiro, cerca de 115.000 euros irán a parar al proyecto paisajístico. Junto con una limpieza del cauce del río para sanearlo, en él se prevé la reforestación de la zona con 200 árboles que se plantarán a ambos lados del paseo, uno cada dos metros. «Serán especies propias de la ribera del río, como abedules y otros ejemplares autóctonos en sintonía con el entorno», indica el regidor, Juan José Dieste.

Acuáticas y de pradera

Hasta seis tipos de plantas (entre ellas, una variedad del lirio) completarán los trabajos botánicos, junto con especies acuáticas (distintos tipos de macrófilas, sumergidas en el agua, a lo largo de 556 metros cuadrados) y una gran pradera de herbáceos que cubrirá 9.400 metros cuadrados, hacia la zona del lago. Para esta última actuación se recurrirá a una técnica utilizada en jardinería y restauración ambiental conocida como hidrosiembra, la cual consiste en esparcir una mezcla acuosa de semillas y otros elementos adaptados al terreno para asegurar una mayor germinación y revegetación del terreno.

A lo largo del paseo, de casi un kilómetro de largo y con dos pasarelas de madera de 16 metros cada una, se dispondrán hasta 20 bancos, con sus respectivas mesas y 19 papeleras. Aunque, uno de los elementos más vistosos será un lago, bajo el cual se esconderá una función medioambiental, como es la decantación del agua de la lluvia y de las pluviales urbanas que recogen la suciedad de las calles.

Además, tanto alrededor del lago como en el paseo se instalará alumbrado a lo largo de 1.406 metros lineales, con hasta 170 luces empotrables en el suelo, 30 balizas, otras tantas farolas y otros puntos múltiples de iluminación.

En cuanto a la polémica tala llevada a cabo en el arranque de la obra para soterrar un tubo de 80 centímetros de diámetro, el alcalde insiste en que «se eliminó lo imprescindible como para que la máquina que coloca la pieza pudiera pasar». Subraya, asimismo, que esta se ajusta al proyecto, que cuenta con todas las garantías medioambientales y ningún grupo presentó alegaciones al mismo.