Don Paquito, una carta sinónimo de calidad

p. bretal c. q.

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

El restaurante boirense destaca por su apuesta por platos de temporada

12 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Cerca de dos décadas de trayectoria avalan el proyecto culinario que lideran los hosteleros Francisco Rebollido y Elías Romero en el restaurante Don Paquito de Boiro. El secreto del éxito de este establecimiento descansa en la combinación perfecta entre los platos que se ofertan en el menú del día, junto con la apuesta por una elaborada carta y la presencia continua de las selecciones de temporada. El nexo o punto de encuentro entre estos tres factores pasa por un mismo sinónimo, la calidad que lleva aparejada cada producto empleado.

Sin embargo, y desde los orígenes del local, el menú no se mantuvo del todo estático. El principal cambio introducido con el paso del tiempo fueron las parrilladas de marisco y las de pescado, una decisión que no tardó en ser aplaudida por la clientela. «No pasado contábamos con produtos como as ameixas e o polbo, pero non eran os protagonistas. Así que pensamos que tiñamos calidade dabondo para ofertar estes pratos, dos que existía demanda», explicó Rebollido.

Asimismo, en el Don Paquito acostumbran a contar con una serie de recomendaciones de menús que solo se sirven en temporada y donde la carne, por supuesto, cuenta con una relevancia primordial. En ese sentido, entre los manjares que los comensales pueden encontrarse puntualmente en el menú destacan las paletillas de cordero con guarnición de patatas redondas al horno, o los guisos y estofados de carrilleras acompañados de verduras.

Escaparate al mar

«Pretendemos que tanto a parrillada de marisco como a de peixe sexan un escaparate do mellor produto da ría», indicó Rebollido. Y es que esta elección despliega un abanico de tres mariscos fríos -buey, nécora y cigala- y otros tantos calientes -langostino, bogavante y navajas-; al igual que la de pescado, donde priman especies como rodaballo, sanmartiño, merluza, bacalao o rape. Se trata de un opción ideal para parejas o para grupos. Además, Rebollido uno de los hosteleros de la zona que se desplazan tres veces por semana a la lonja rianxeira, donde actualmente está abierta la campaña del bou de vara.

También sobresalen otros platos, como las ostras al natural, las cocochas con almejas, las gulas en salsa verde o las empanadas caseras de pan de trigo -realizadas con harina elaborada por el método tradicional-, con la que se preparan viandas de berberechos con su concha. «A idea é non disfrazar o sabor de ningún dos alimentos», comentó Rebollido. A lo largo del próximo mes, a las recomendaciones habituales se sumará también la lamprea del Ulla, cocinada en su sangre.

Por otra parte, el plato estrella pone sobre la mesa un chuletón de vaca vieja de kilo y medio. A este le acompañan en la carta una selección de los cortes más conocidos de la carne y las clásicas parrilladas de churrasco, otro clásico.