Cabo da Cruz cerró la temporada como la octava mejor trainera

P. Bretal RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

Orio, Hondarribia y Santurtzi coparon los primeros puestos de la clasificación final. Ares y Zarautz ascendieron a la élite del remo nacional

16 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Os obxectivos desta tempada quedaron cumpridos, pero a nivel deportivo sempre gusta facelo ben e toda esta fin de semana fomos con moitas baixas e faltounos ritmo». Son palabras de un inconformista Beni Silva, el entrenador del Club de Remo Cabo da Cruz en la Eusko Label Liga -único representante gallego en el 2019-, al término de la regata de Portugalete; la última de una temporada en la que los barbanzanos acabaron en la octava plaza, logrando la meta fijada.

Por su parte, Orio que ya se había proclamado campeón de liga de forma matemática el sábado -y que se dio el capricho de realizar una jornada tranquila finalizando séptimo-, estuvo acompañado de Hondarribia y de Santurtzi en el podio final. En cuanto al playoff, este sonrió a Ares -ganador de la Liga Galega de Traíñas (LGT)- y a Zarautz, que lograron el ascenso. Además, la tripulación femenina de Hondarribia firmó su permanencia en la Liga Euskotren.

Lo cierto es que los boirenses llegaron a esta recta final con el hándicap de carecer de alicientes competitivos y con dos semanas menos de tiempo de mar, tras haberse quedado a las puertas de disputar La Concha. Tan solo podían optar a colocarse en la séptima plaza, una completa odisea, ya que Ondarroa no tendría que haber puntuado y ayer dio la sorpresa con el segundo puesto.

Bandera El Corte Inglés

Urdaibai, que no pudo ser profeta en su tierra el sábado, tampoco se fue con las manos vacías y ondeó su primera bandera de la temporada en Portugalete. Hondarribia obtuvo el tercer mejor tiempo, por delante de Donostiarra, Zierbena y Santurtzi.

Una vez finalicen los festejos por la Corona Caixa Bank, que se coloca Orio por primera vez en su historia, solo quedará saber cuáles son los primeros movimientos y fichajes de remeros y remeras que se producirán. En este sentido, será determinante dónde pongan los ojos los clubes vascos, con mayor capacidad económica que los gallegos.