El desembolso en obras superó los 75 millones de eurosLa selección genética logró que las vacas den más lecheLa falta de terreno puede condicionar el crecimiento
BARBANZA
Alcanzar el actual nivel competitivo no ha resultado en absoluto barato. Se calcula que las inversiones en la mejora y ampliación de las instalaciones productivas superó los 75 millones en el período 2000-2009. A esta cantidad hay que sumar otros 55 millones que, según varios estudios, se destinaron a la adquisición de maquinaria, equipos de ordeño o compra y arrendamiento de fincas.
Los avances del sector lácteo no serían posibles sin la apuesta de los ganaderos en la mejora genética de sus rebaños. Si hace una década la producción media de una vaca incluida en los programas de control se situaba en 9.000 litros, a día de hoy un animal promedia algo más de 11.200 litros, tal y como se extrae de los datos recogidos por Africor-Coruña.
Aunque en la última década las granjas triplicaron su base territorial, la dificultad para acceder a más superficie agraria útil puede ser un factor limitante a la hora de que muchas puedan crecer. Esa es la opinión de los expertos, que pronostican que la nueva PAC impondrá muchos condicionantes ambientales en los que tener superficie suficiente será básico.