La entidad crucense celebró su aniversario con una gran fiesta y la presentación de los equipos de este curso
31 mar 2019 . Actualizado a las 17:59 h.No todos los días se cumplen años, pero si a ese hecho se le suman otros factores, como el de que la cifra alcance las cuarenta primaveras y que se trate de un club deportivo que se ha ganado el corazón de toda una población, tal efeméride se merece un homenaje por todo lo alto. Este es el resumen de la fiesta que se vivió en Boiro la noche del viernes, con el aniversario del Club de Remo Cabo da Cruz.
Para nada se trató de un cumpleaños más, pues la entidad aprovechó este telón de fondo para realizar la presentación anual de los equipos de las distintas categorías que han ido conformando para esta temporada y de los que sus respectivos técnicos fueron explicando cuáles serían los objetivos a alcanzar. También se hizo un repaso de las cuatro décadas de este proyecto que comenzó con un grupo de 20 personas y hoy cuenta con más de 130.
Por otra parte, el acto también simbolizó una demostración del músculo social con el que cuenta el Cabo da Cruz, ya que además de numerosos vecinos y socios del club, también asistieron apoyos fundamentales encarnados en el alcalde de Boiro, Juan José Dieste; Margarita Hermo, directora de relaciones institucionales de la firma Jealsa-Rianxeira, así como del máximo representante de la empresa JJ Chicolino, Juan José Fajardo.
Los retos de 2019
A nivel deportivo, todos aguardaban la subida al escenario de Beni Silva, entrenador del primer equipo que compite en el máximo nivel de este deporte, la liga ACT. El histórico entrenador señaló que lucharán por mantener la categoría y la tanda de honor que lograron tras una de sus mejores temporadas.
Gustavo Vázquez, al cargo del equipo que este año ascendió a la Liga Galega de Traíñas A, explicó que buscan consolidarse, pero que no dudarán en luchar por todo. Vázquez también estará al cargo de la base y de los tres técnicos de esta: Javi Lago e Iago y Laura Davila. Por último, Lago estará a las riendas del equipo femenino, un bloque con muchas opciones de colocarse la corona gallega esta temporada.
El ambiente festivo marcó una jornada que comenzó de tarde con la visita del empresario Jesús Alonso y luego contó con una paellada a precios populares y una buena sesión de música para disfrutar. La fiesta también funcionó como una despedida de la antigua sede del club, que será demolida para la construcción de la nueva y moderna infraestructura, a través de una visita en la que fue inevitable que aflorasen los buenos recuerdos vividos y que tuvo las puertas abiertas para todo el que desease recorrer los pasillos por una última vez.
En este sentido, el presidente del Cabo da Cruz, Daniel Vázquez, aprovechó para agradecer el alto nivel de participación que ha tenido la directiva en el diseño de las futuras instalaciones.
