Cabo remontó en Zarauz con un séptimo puesto y ya mira a Galicia

P. Bretal RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

MARCOS CREO

Hondarribia se erigió ganador de la doble jornada

19 ago 2019 . Actualizado a las 20:59 h.

A veces parece que en la trainera del Club de Remo Cabo da Cruz uno de sus mejores remeros a bordo es la presión. Los de Beni Silva no suelen defraudar en las pruebas a doble jornada y la de hoy en Zarauz no fue una excepción. Los crucenses firmaron un más que merecido séptimo puesto, tras lograr remontar el noveno que habían cosechado el sábado. Finalmente, la tripulación barbanzana supo aprovechar el viento de cola que supone ser el claro favorito de la última tanda, a pesar de todo lo que se jugaban los colistas, San Pedro y Astillero. La victoria volvió a pertenecer a Hondarribia (20:30,46) -que ondeó la bandera tras la suma de tiempos-, seguido de Orio, Santurtzi y Zierbena.

Sin apenas margen de cambios en un escenario en el que los principales clubes vascos juegan una partida de ajedrez dosificando sus fuerzas de cara la clasificatoria de La Concha, lo cierto es que Cabo ha vuelto a dar un golpe sobre la mesa para regresar a la octava plaza de la clasificación general de la Euskolabel Liga; aunque se halle a ocho puntos de Ondarroa y de la séptima vacante, su posición habitual en el campeonato.

Precisamente, tras batir a Kaiku, el principal rival de los únicos representantes gallegos en la élite del remo nacional será el bloque de Ondarroa.

Desenlace en casa

A la temporada le queda un suspiro que será exhalado en aguas gallegas. Y es que Cabo ya está mirando al hogar, concretamente a Bueu y a sus dominios, donde se disputarán las dos últimas jornadas antes de las clasificatorias para La Concha. En este sentido, la prueba del domingo en la localidad boirense, a partir de las 12.00 horas, constituirá la última oportunidad de intentar entrar en la regata que nadie quiere perderse.

Tras lo visto en las aguas de Zarauz este fin de semana, todo apunta a que Cabo cuenta con muchas posibilidades de obtener el pase a la histórica competición de San Sebastián, pero deberá conseguir apuntalar, como mínimo, el octavo puesto que supone el corte de participantes.