Alianza contra la fauna salvaje

A. Gerpe / j. vENTURA LADO REDACCIÓN / LA VOZ

RIBEIRA

cedida

Profesionales de Barbanza y Costa da Morte sufren cuantiosas pérdidas por los ataques de lobo y jabalí

22 feb 2019 . Actualizado a las 20:01 h.

La convivencia entre los profesionales dedicados al sector primario y la fauna salvaje siempre ha sido convulsa, pero la situación ha ido empeorando y, en la actualidad, ganaderos y agricultores de las áreas de Barbanza y Costa da Morte consideran que las pérdidas causadas por lobos o jabalíes amenazan su actividad. No son los únicos que padecen este problema y, precisamente, la necesidad de encontrar soluciones conjuntas ha llevado a un grupo de damnificados de la zona de Ferrol a buscar alianzas.

Este es el origen de la recién creada Asociación de Prexudicados pola Fauna Salvaxe en Galicia (Aperfasa), que ha iniciado una campaña para sumar afectados de todas las comarcas. Mañana celebrará una reunión en Porto do Son, a la que seguirán otras en diversas localidades. La Costa da Morte también figura en su hoja de ruta.

Jabalí y lobo están en el punto de mira. Tanto en la Costa da Morte como en Barbanza, los cerdos salvajes constituyen un problema a nivel agrícola, viario e, incluso, deportivo. El pasado 20 de enero tuvo que suspenderse el partido de Tercera Autonómica entre el Camelle y el Laxe porque los mamíferos, junto con la lluvia, dejaron impracticable el terreno.

Accidentes de tráfico

Los jabalíes también suponen una amenaza para la seguridad del tráfico. Solo en la primera semana de enero provocaron media docena de accidentes entre Carballo y Carnota. Los siniestros también se suceden tanto en la AC-550, especialmente entre Porto do Son y Ribeira, como en la carretera que va hasta el faro de Corrubedo.

Miguel Regueira, un conductor del municipio de Baio, explicó que en el mismo punto del vial de Cabana en el que un jabalí dejó inservible su furgoneta «aos tres días houbo outro accidente».

Por lo que respecta a los agricultores, aseguran estar desesperados. El presidente de la Asociación de Propietarios del Parque Natural de Corrubedo, José Martínez, comentó que la mayoría de los dueños de fincas han dejado de cultivarlas: «Porque non lles resultaba rendible. Traballas para alimentar ao xabaril».

Un productor del municipio de Carballo, Carlos Lema, relata sus frustrados intentos para evitar que el animal entrase en sus fincas: «Usei espantallos, e nada, ultrasóns como os empregados para os paxaros, e tampouco funcionou».

Ambas zonas tienen hasta una docena de municipios catalogados como de mayor probabilidad de que se produzcan daños causados por jabalíes o por lobos.

Siguen los ataques a reses

Los cánidos constituyen desde hace varios meses el principal quebradero de cabeza de los ganaderos de la sierra barbanzana. El criador de Lousame Enrique Laranga afirma haber perdido tres reses en menos de una semana, mientras que el comunero de Boiro Álvaro Castro indicaba ayer: «Os lobos comeron dous años, non lles deixaron nin as patas». Laranga afirma que tener reses en el monte actualmente «é unha ruína» y dice que algunos profesionales han optado por abandonar la actividad.

Temerosos de perder los terneros y potros que están a punto de nacer, los ganaderos de Barbanza han solicitado el apoyo de los dirigentes políticos de la zona para reunirse con los conselleiros de Medio Rural y Medio Ambiente. El próximo martes está previsto que lo hagan con el delegado provincial, Ovidio Rodeiro.

La situación en la Costa da Morte no es tan preocupante porque la cabaña de reses mostrencas es inferior, pero tampoco permanece a salvo de las embestidas de estos animales.

Hace unas semanas, una potra de siete meses fue la última víctima de los lobos en Monte Faro, en Vimianzo. El animal se encontraba dentro del cierre que gestiona una asociación caballar y el hecho de estar junto al resto de la manada no impidió que fuera devorado en buena parte por los cánidos.

«A única opción é regular as poboacións»

Un grupo de afectados decidió crear la Asociación de Prexudicados pola Fauna Salvaxe en Galicia (Aperfasa) de la que es secretario Andrés Saavedra, quien explica que son muchos los afectados: «Alí onde hai cultivos aparece o xabaril, e o lobo tamén está causando numerosos estragos».

Cuando se le pregunta por las alternativas, Saavedra apunta: «A única opción é regular as poboacións. Débese controlar a fauna». Manifiesta que, en el caso del jabalí, puede considerarse una plaga: «É un perigo a nivel viario, sanitario e social». El colectivo ya mantuvo un encuentro con la directora xeral de Conservación da Natureza, Belén Docampo.

«O lobo fixo mellor á raza humana»

El presidente del colectivo ambiental Senda Nova, José Menéndez, al margen de respetar los problemas que puedan tener los ganaderos, afirma que la premisa debe ser «manter aos animais no seu ecosistema» y más a uno como el lobo «que está no vértice da cadea trófica». Dice que es fundamental a la hora de lograr que se reproduzcan los mejores ejemplares de las especies que depreda. Cita incluso un libro de Javier Talegón, en el que se demuestra como a lo largo de la historia «foi capaz de modificar as condutas. O lobo fixo mellor á raza humana», por mucho que sea un animal mítico que «se presta ao sensacionalismo».