Niegan una indemnización a los heridos por la ola que entró en el Acuario coruñés

A.M. A CORUÑA / LA VOZ

CARBALLO

Entre los afectados, hay un vecino de la localidad de Muxía

18 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las olas de 11 metros de altura que golpearon la costa coruñesa en aquel tormentoso 3 de marzo del 2014 destruyeron la cristalera del restaurante del Acuario, donde varios clientes disfrutaban de las espectaculares vistas que les brindaba el temporal. Dos de ellos resultaron heridos, entre ellos un muxián. El mar los golpeó con fuerza, desplazándolos varios metros.

Cuatro meses después de aquello, los lesionados se presentaron en el Ayuntamiento para reclamar una indemnización por los daños corporales y materiales, pues entendían que las autoridades municipales, como contratistas de la concesión de las instalaciones hosteleras del Acuario, eran responsables de lo ocurrido, al no prever que la fuerza del mar derribara la cristalera y no haber cerrado las instalaciones para evitar que la gente acudiera. Creen que el Ayuntamiento «debería haber emitido una orden de desalojo del Acuario y no lo hizo».

Recientemente, los reclamantes tuvieron al fin respuesta municipal. Y ahí les dicen que no les dará indemnización alguna por varios motivos. Porque los lesionados tenían que ser conscientes del peligro de apostarse en un lugar tan golpeado por el mar; y en caso de reclamar algo, que lo haga a la empresa concesionaria que explotaba entonces el restaurante del Acuario. Así que no les dará nada.

Pérdidas

Ni por las lesiones, ni por los gastos médicos de su curación; tampoco por los móviles, los zapatos que destrozaron o lo que se tuvo que gastar en la tintorería. Los servicios jurídicos municipales les niegan resarcimiento alguno porque «la causa eficiente es imputable al propio dañado».

Peligro voluntario

«En primer lugar, debe señalarse que ese día se había activado una alerta roja de la que se había informado a través de la prensa ya el día anterior. Es decir, que fue de público conocimiento. Así que los ciudadanos que decidieron situarse en lugares cercanos al litoral lo hicieron voluntariamente», se expone en la respuesta a la reclamación. Incluso recuerdan a los lesionados que aquel hombre que también había resultado herido en el paseo marítimo cuando se le vino encima un banco de piedra en mitad de un temporal en 2008 no recibió nada porque así lo determinó la Justicia. También les dice que si a alguien puede reclamar es a la concesionaria del restaurante, pues se les avisó varias veces de que desalojaran y no lo hicieron.

Ante esta situación, el abogado de los lesionados, Bernardo Couceiro, anuncia que presentará una demanda conjunta contra el Ayuntamiento, a la concesionaria y a la compañía de seguros.