«Creo que estoy en mi mejor momento y con ganas de avanzar todavía más»

Santiago Garrido Rial
S. G. Rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

CEDIDA POR GETIN

Es una de las leyendas del pop español desde hace más de tres decenios. Llega a carballo (lunes 24, 23.00 horas) para presentar su disco «El último vuelo del hombre bala». Pero este antiguo integrante de Duncan Dhu también recuperará algunos de sus clásicos

24 jun 2019 . Actualizado a las 20:17 h.

Mikel Erentxun (Venezuela, 1966, pero residente en San Sebastián desde los 8 años) está lógicamente ligado al dúo Duncan Dhu, pero tiene una exitosa carrera en solitario. En Carballo, este lunes 24 de junio (23.00 horas), presentará su muy reciente disco El último vuelo del hombre bala, que cierra la trilogía iniciada con el doble Corazones y El hombre sin sombra.

-Hace veinte años ya estuvo en Carballo, con Duncan Dhu. 

-¡Pues no lo recordaba! En estos veinte años he podido dar no sé cuántos conciertos, muchísimos. Llevo una carrera musical muy intensa, casi sin respiro. Son casi 34 años de carrera, un poco a la manera de Bob Dylan, sin descanso. Empiezo a tener serias lagunas con muchos conciertos y muchas ciudades.

-Y antes, en Sada, ganando un festival rock en Sada en el 82. La hemeroteca lo sitúa muchas veces en Galicia.

-¡Lo de Sada es prehistoria musical! Ni siquiera era Duncan Dhu, sino un grupo anterior. Y lo de Galicia, siempre nos ha ido muy bien, tanto a Duncan Dhu como a mí en solitario. Hemos tocado en las cuatro provincias. Galicia es un territorio muy afín a mi música. A mí me encanta. Cuando empezábamos, Galicia estaba un poco desconectada del resto de España, por las comunicaciones. Ir a tocar ahí era toda una aventura por las malas comunicaciones. Afortunadamente ya no es así.

-¿Qué va a presentar en Carballo?

-La gira, que ha empezado hace muy poco, incluye canciones de la trilogía, que cierra el disco El último vuelo del hombre bala. También recuperamos canciones más antiguas. Es un concierto bastante variado, y bastante extenso en el recorrido, aunque se centra en el último trabajo. Sobre todo sonicamente: las que no son del último trabajo las hemos arreglado para que sí lo parezcan.

-¿Será una actuación intimista, o más para animar?

-En este tipo de actuaciones tratamos de que sea divertido, con muchas canciones que la gente va a conocer, incluso alguna de Duncan Dhu. Por tanto, será un concierto para todo el mundo.

-Le van a pedir los clásicos.

-Es el precio de haber triunfado, y haberlo hecho hace mucho. Es la mochila, con muchos éxitos como Duncan Dhu. Y es lógico que se demanden esos temas. Yo, aunque voy a presentar un disco nuevo y haremos canciones nuevas, también las haremos viejas.

-Lleva mucho tiempo en la música, y generalmente cosecha además muy buenas críticas. ¿Cómo se consigue eso?

-Es complicado, y es lo que más valoro. Mis últimos discos, y esta trilogía en concreto, es la que mejores críticas ha tenido en toda mi discografía. Un reconocimiento así después de tantos años está muy bien. Síntoma de que la carrera sigue viva, de que el artista está vivo, de que no se queda anclado en el pasado. Y eso es una gozada. Es lo que siento: creo que estoy en mi mejor momento y con ganas de seguir avanzando todavía más.

«Conocí tiempos mejores en los que la música tenía más peso en la sociedad»

La carrera de Mikel Erentxun como solista comenzó en 1992, paralela a la de Duncan Dhu, que ya venía de los 80. Y ha sabido adaptarse y dar giros a su música.

-El productor de su trilogía es Paco Loco, muy conocido en determinados ámbitos musicales. Sobre todo este tercer trabajo da la sensación de que está muy bien elaborado.

-Paco Loco es un productor asturiano que lleva muchos años en el sur. Ha producido más de 700 referencias, casi todas muy indies, muy alternativas. Cuando nos juntamos por primera vez fue como ese choque de trenes, el venía del mundo independiente, yo de otro más mainstream, y yo creo que el resultado ha sido beneficioso para los dos. Hemos hecho tres discos muy buenos, y me imagino que seguiremos colaborando, porque el resultado está ahí.

-Usted sigue en la brecha en un mundo de la música tan cambiante y cambiado en estos años. ¿Cómo ha visto la evolución?

-Ha cambiado bastante, sí. Es un poco inútil tratar de agarrarse al pasado, porque no va a volver. Es una pena. Yo tuve la suerte de conocer tiempos mejores en los que la música tenía mucho más peso en la sociedad. Ahora mismo es un consumo inmediato el que se hace de ella, de las canciones. Los discos apenas duran nada en la calle. Antes un disco funcionaba meses en emisoras, en televisiones... Los discos duraban más, se les daba más valor. Ahora la gente consume canciones en el teléfono móvil. Ha cambiado completamente la forma de dar a conocer la música, y hay una industria que ya no existe y antes sí existía: tiendas de discos, estudios de grabación, instrumentos, compañías, mucha gente que vivía de la música.

-¿Echa de menos los vinilos, las agujas, la 33 y 45 rpm?

-No, porque los sigo teniendo. Mis últimos discos se siguen editando en vinilo. Yo escucho en mi casa la música así. Pero hace mucho que no pongo un single a 45 revoluciones, con el plastiquito aquel para tapar el agujero. Pero me gusta más en vinilo que en digital.