Una aclaración ante las injurias sufridas

Miguel Ferreiro Suárez

CARBALLO MUNICIPIO

05 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Ante la repercusión pública que están teniendo unas cuartillas que A. A. M. A. ha distribuido por las calles de todo Carballo, en las que se me difama, calumnia e injuria; me veo obligado a remitir esta carta a fin de aclarar las relaciones profesionales con esta persona.

Dicho señor demandó en el año 2005 a todos los vecinos de una comunidad. Estos fueron defendidos por mí con éxito.

Varios años después, él contrató mis servicios para que le defendiese en una denuncia que había presentado en la Guardia Civil y que ya se estaba tramitando en el juzgado. Acusaba a un vecino de haberle empujado dentro del portal y causarle lesiones. Accedí. Se celebró el juicio en el Juzgado de lo penal. Me felicitó expresamente por mi labor al acabar el juicio. Se dictó sentencia absolutoria el 23-10-2018 contra el acusado dado que no había testigos presenciales y las dos primeras testigos que se acercaron al portal y llamaron a una ambulancia manifestaron que mi cliente les había dicho que se había caído. Además, el contrario presentó prueba documental y testifical de que no se encontraba a esa hora en la zona. El juez no impuso las costas a nadie.

El problema vino porque le aconsejé no apelar. Mi criterio se basaba en el bagaje probatorio antes indicado y, también, en la doctrina del Tribunal Constitucional, que considera que una persona absuelta en instancia no puede ser condenada por un tribunal de apelación cuando la absolución se basa en declaraciones testificales, al no haberse celebrado la prueba ante ellos (principio de inmediación). Y todo ello, con el riesgo añadido de que condenaran a A. A. M. A. a pagar las costas (es decir, las facturas del abogado y procurador contrarios).

Pues bien, hace unos 6 meses me aborda en el parque situado al lado de mi domicilio, gritando y diciéndome que yo le engañé; que se consultó y que debimos haber apelado. Que me había vendido. Asimismo, me dijo que la culpa también era de la Guardia Civil que había hecho mal la instrucción de su caso y que los iba a denunciar.

Ahora ha decidido distribuir por todo Carballo el material injurioso hacia mi persona.

Huelga decir que he presentado la correspondiente denuncia contra él para que se depuren las responsabilidades penales y civiles que procedan.

Quiero aprovechar para dar las gracias a todos los clientes, compañeros de profesión, familia y amigos, que en este ingrato momento me han trasladado su apoyo. Después de casi 30 años de ejercicio de la abogacía, siempre reconforta.

Miguel Ferreiro Suárez es abogado y presta sus servicios en un bufete de Carballo.