21 días corriendo contra la gripe

R. D. Seoane A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

MARCOS MIGUEZ

En apenas tres semanas, la campaña de vacunación contra el virus estacional ha cubierto ya a casi el 60 % de los que se inmunizaron el año pasado en la comarca

20 nov 2018 . Actualizado a las 10:20 h.

El temor a la gripe, que el año pasado provocó solo en el Chuac 73 fallecimientos, y la insistencia de las autoridades parecen estar dando resultado. En tres semanas, en la comarca coruñesa se ha vacunado contra el virus una población equivalente a casi el 60 % de quienes lo hicieron el año pasado en diez semanas. Son los municipios más pequeños y envejecidos los que más se han apurado a responder a la llamada de salud pública: en Irixoa se han pinchado el 84 % de los que lo hicieron durante toda la campaña del 2017, casi el 78 % en Sobrado, y el 75 % en Aranga. Cerca les anda Culleredo, de mayor tamaño y con más población joven, con un 64 %, y entre los que van más lento, destaca por tamaño Arteixo, con un 49,6 %. Aun así, dicen los expertos que no hay que relajarse porque el pinchazo protector está recomendado a todos los mayores de 60 años, a las embarazadas, y a quienes, independientemente de la edad, sufran alguna enfermedad crónica, así como a los cuidadores, convivientes y profesionales en contacto con ellos. En esta ocasión, los especialistas y los profesionales de enfermería están haciendo hincapié en desterrar falsos mitos en torno a la vacuna. 

Falsos mitos

No es efectiva. El virus de la gripe tiene alta capacidad de mutación, de ahí que la vacuna cambie cada año. El suero protege frente a las cepas circulantes que se incluyen en su composición basándose en los datos de los centros de control distribuidos por el mundo. Su efectividad no es del 100 %, pero reduce el alcance de la epidemia y, muy importante, las complicaciones que causa la gripe en sectores sensibles: los ingresos por fallos cardíacos bajan un 22 % con la vacuna, un 30 % los de accidentes cerebro-vasculares, y las embarazadas no vacunadas se hospitalizan hasta siete veces más.  

Desencadenante

Provoca la gripe. «No es verdad que la vacuna provoque la gripe -subraya María José Pereira, responsable de Medicina Preventiva del área sanitaria-. Lo que sucede es que hay otras infecciones que pueden dar una sintomatología clínica muy parecida». 

Efectos secundarios

Como fármacos comunes. Es cierto que puede provocar efectos secundarios, casi siempre banales. En la inmensa mayoría de los casos «son similares a los que puede dar el ibuprofeno, un medicamento que por lo general no lo tomamos una sola vez al año, sino a la mínima», apunta.  

Metales pesados

Mercurio. «No es cierto que las vacunas, ni de la gripe ni ninguna de las otras que se administran en España, tengan mercurio», recalca la especialista. Tampoco derivados del mercurio que se hayan demostrado nocivos para la salud. Es cierto que históricamente, al inicio del desarrollo de las vacunas, se utilizaban viales metálicos, pero en todo caso ni siquiera podía provocar depósitos en el organismo, ya que se eliminaría por vía biliar. Su cantidad sería «similar a la que tiene una lata de atún», indica.  

Intereses

El autismo. María José Pereira es especialmente incisiva contra uno de los falsos mitos que más daño ha hecho a las campañas de salud pública para inmunizar a la población infantil: que las vacunas pueden provocar autismo. Detrás de esa afirmación existen «intereses espurios», tilda la doctora. El «bulo» creció en 1998 a raíz de la publicación de un artículo de Andrew Wakefield, médico británico, que relacionaba la triple vírica (sarampión, paperas y rubeola) con el autismo. Se comprobó que había falseado los estudios y, además, que tenía intereses ocultos, puesto que estaba trabajando para la elaboración de otra patente de una nueva vacuna del sarampión. Aunque se le retiró la licencia y la comunidad médica insiste en la necesidad de vacunar a los niños, en Europa el número de casos se incrementó un 400 % en el último año.