Noel Turbulencias: «Se habla mucho de lo innovador de C. Tangana, pero aquí tenemos a Baiuca»

Que la escena musical gallega atraviesa una de sus cimas creativas parece algo indiscutible. Y por eso Noel Turbulencias (A Coruña, 1984) ha querido plasmar este momento histórico en un libro que ha titulado Galicia MusiCalidade y que en breve podremos tener en nuestras manos tras culminar con éxito el pasado viernes una campaña de crowdfunding. La presentación oficial tendrá lugar el viernes 15 en la cervecería Malte de las Atochas. Allí entregarán las recompensas de los mecenas que lo deseen y aprovecharán para montar una mesa redonda con algunos de los artistas que salen en el libro. El resto de los mortales tendrán que esperar al mes de abril para poder adquirirlo.

—Meter toda la música gallega en un libro es todo un reto.

—Es que tampoco es eso. Quise alejarme en todo momento de un aspecto enciclopédico. Pero sí que intenté que estuvieran al menos los principales referentes, aquellos que han destacado, que han conseguido mayor exposición mediática o que se han hecho imprescindibles o que en un momento dado fueron catalizadores de la propia escena. El objetivo siempre fue darle una perspectiva contemporánea. Contar lo que ha estado pasando en las últimas dos décadas. Pero para analizar la escena actual había que poner un poco en antecedentes a la gente, dar contexto y hablar de aquellos que abrieron el camino que se está recorriendo ahora. Había que dar cierta perspectiva de que toda esta riqueza y variedad que tenemos ahora viene de algún lado. Para hablar de The Rapants hay que referirse primero a Terbutalina y a Novedades Carminha y, a su vez, a Siniestro Total. Existe una conexión indudable.

—¿Tiene miedo de que se le haya olvidado alguien?

—Faltan muchos artistas, seguro. Es imposible resumir toda la escena, lo que da muestra de lo rica que es. Podrían hacerse tres volúmenes más y aún así no estaría terminada. Hablo en un capítulo de la música folk, de los que pusieron los primeros ladrillos. Pero solo menciono a los ladrillos más gordos, porque es inabarcable: Milladoiro, Luar na Lubre, Fuxan os ventos, Carlos Núñez, Susana Seivane... Podría hacer un libro solo de esto.

—¿Y cómo realizó la selección de artistas que salen en el libro?

—Lo primero fue intentar ser objetivos, hacer un listado de artistas grande, con unos 150 aproximadamente, que tuvimos que ir puliendo. Porque el otro objetivo era ceñirnos a cien páginas y hacerlo todo muy visual.

—Lo de ser objetivo cuando se habla de música siempre me pareció algo imposible.

—Claro que hay pinceladas personales en algunas decisiones, pero ninguna atenta contra la realidad. Hicimos una pequeña encuesta entre gente involucrada en la industria musical y habituales de conciertos y festivales. Les pasamos ese listado y puntuaron el grado conocimiento de cada artista. De todas maneras sé que voy a tener que pedir perdón varias veces por haberme dejado fuera a alguno, es inevitable.

—¿Tiene reconocimiento nuestra escena musical más allá de nuestras fronteras?

—El telón de grelos es más denso de lo que creemos. Tenemos un circuito cerrado de músicos que prácticamente solo giran por Galicia. Pero a la vez tenemos cada vez más ejemplos de artistas que se asoman a la península. Mira Fillas de Cassandra. O Grande amore.

—Hay una especie de vuelta a las raíces de la música gallega. ¿Se entiende esto en el resto de España?

—Se entienden cuando hay calidad. Emilio José en su momento tuvo un reconocimiento enorme. Si de algo podemos presumir es de tener una escena mucho más diversa y transgresora que en otras comunidades autónomas. Vamos más allá de la imagen de grupo festivalero, que es de lo que más hay. Los artistas que salen de aquí son diferentes, tienen más personalidad, por lo general. Somos más innovadores y revolucionarios. Pero desde siempre. Y ahora viene este nuevo movimiento que tiene un pie en el folklore. Se habla mucho de cómo Rosalía o C. Tangana le han dado una vuelta a la tradición, de lo innovadores que son, pero tendrían que echar un ojo a lo que lleva tiempo haciendo Baiuca.

«En estos momentos hay una explosión de talento enorme en Galicia»

Una parte fundamental de Galicia MusiCalidade es el apartado visual, con las magníficas ilustraciones de Victoria Sánchez: «Victoria es la columna vertebral del proyecto. Sin ella no habría libro, lo tengo claro. Ella había hecho en su momento Murcia loves indie, un libro que sirvió en cierto modo de inspiración para este», explica el autor.

—Sometieron el proyecto del libro a una campaña de crowdfunding y funcionó.

—Bueno, el libro iba a salir igual aunque no se cumpliesen los objetivos. Era una buena manera de hacer una campaña de comunicación previa al lanzamiento. Pensamos en la autoedición desde el primer momento porque una editorial tiene que mirar más el céntimo y nosotros no queríamos escatimar en recursos: es un libro de tamaño elepé, con buen papel, tapas duras... Y así sacamos además las recompensas, láminas con las ilustraciones de Victoria, bolsas y hasta una baraja con los artistas que salen en el libro, así que puedes jugar a montar tu propio festival [ríe].

—¿Está viviendo la escena musical gallega un buen momento?

—Hay una explosión de talento enorme en estos momentos. Siempre hubo referentes, pero muchos se limitaban a mover públicos muy limitados. Ahora la cosa va a más. Mira las Tanxugueiras, algo que tiene mucha historia detrás, que parece que surgieron de la nada y no es así. Pues bien, de ahí ha salido de alguna manera el hecho de que Fillas de Cassandra llenen el auditorio Mar de Vigo. O Mondra, que sin duda lo va a romper en los festivales del próximo verano. Y algo importante, se apoyan entre ellos, hay comunidad, fraternidad, cierto concepto de escena, algo que en la industria musical no suele ocurrir.

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