El «brunch» de ocho platos más fotogénico está en A Coruña

Patricia García Lema
patricia garcía A CORUÑA

A LA ÚLTIMA

Ingooco convirtió Padre Feiijoo en el epicentro coruñés de los «foodies» con su fusión de desayuno y comida para disfrutar en buena compañía

08 nov 2019 . Actualizado a las 20:36 h.

Este es, posiblemente, el brunch más fotogénico de A Coruña. También uno de los más ricos y abundantes: prepara la cámara y el estómago porque aquí te esperan ocho platos para relamerte. Y, además, en buena compañía. O como dice el lema del local: «In good Company». «Creemos que los locales los hacen las personas y eso es lo que queremos: que vengas aquí y pases un buen rato y en buena compañía», explica Sandra Pérez, la madre y responsable de Ingooco, en el número 6 de la calle Padre Feijoo, que está revolucionando las mañanas de la ciudad.

El brunch es uno de sus productos estrella. Se puede tomar todos los días, pero lo mejor, explica Sandra, es reservar con antelación, sobre todo los fines de semana. El menú del brunch es una combinación de los productos dulces y salados que prepara, con mucho «cariño y pasión», Javier Cancelo en la cocina de Ingooco. ¿Listo para este viaje gastronómico? «Empieza con una selección de fruta de temporada con cobertura de chocolate; unas tortitas con plátano y salsa de tofe y gofre con chocolate caliente», enumera Sandra. ¿Salivando ya? Espere a ver lo que falta: «También servimos un surtido de tartas, que suele incluir nuestra tarta banoffee o New York cheescake, muffins y cookies caseras».

Todo se sirve en vajillas diferentes, con platos de colores y cubiertos dorados, y peanas con varias plantas que son la fantasía de cualquier foodie. Y esto es solo la mitad del brunch, ahora viene la segunda parte: pan de cristal con rúcula, aguacate y salmón marinado; sándwich de pan polar con jamón cocido y queso Gouda; unas uvas que parecen de cerámica de los perfectas que son, combinadas con frutos secos y mermelada de membrillo y, uno de los favoritos de los ingoocos, los huevos benedictine. Para darle un toque más neoyorkino al brunch, aquí se puede vivir un momento muy Sexo en Nueva York con un cóctel sin alcohol «passion o de cítricos» en la mano, también incluido en el menú.

Pero Ingooco no es solo un local de foto: aquí se sirven desayunos desde las ocho de la mañana hasta las ocho de la tarde. «No queremos encasillarnos: queremos que cada uno tome lo que le apetece en cada momento y si quiere desayunar a las seis de la tarde que pueda hacerlo». Hay once propuestas diferentes, todas con nombres de pintores, del Sorolla, cargado de fruta y luz, al Rubens, para salir rodando.